¿Por qué lo tenemos todo y sin embargo no tenemos nada?

it-takes-time-effort-and-experience-to-reveal-the-upper-worldImaginen que un huésped de otro planeta llegara a la Tierra. Miraría a su alrededor y diría, «Escuchen, señores, todo aquí parece sensacional. Tienen una impresionante infraestructura mundial, comunicaciones móviles, teléfonos, el Internet, autos y cosechas abundantes. ¡Lo tienen todo! Pero, ¿por qué a pesar de todo esto, se sientan en casa asustados, esperando que algo suceda? Pronto no tendrán nada para comer. ¿Están locos? Qué están esperando? Pónganse a trabajar!

Y nosotros contestaríamos, «Queremos trabajar, pero nadie nos contrata». El huésped se quedaría de una pieza. «Pues, ¡empiecen por hacer algo! Envíen barcos y aviones para activarse». Y nosotros diríamos, «No podemos enviar nada porque nadie nos paga y no podemos hacer otra cosa, porque los hombres no están abasteciéndonos con nuestras necesidades…» Así es que lo que nos hace falta es una conexión. ¿Cómo llegamos a esto? Estamos conectados egoístamente, pero ahora nos tenemos que elevar al siguiente nivel en donde requerimos conexiones altruistas. Sin embargo, no contamos con ellas. Este problema penetra por todas partes e inutiliza a todos. De aquí en adelante, lo único que puede lograr que todo funcione es la intención correcta. Por ejemplo, los bancos que florecerán son aquellos con la intención correcta. Así es como el mundo aprenderá. 

Pero, este proceso se inició hace muchos años. Hace unos cincuenta o sesenta años empezamos a notar que quien conquista por la fuerza no gana en última instancia. Más bien, el ganador es quien arregla su vida y sus negocios correctamente en relación con la sociedad.

(Tomado de la lección sobre el artículo de Baal HaSulam, Un Precepto, impartida el 5 de marzo del 2009).

Ver la lección Un precepto 58:17 video

Escuchar la lección Un precepto 58:17 audio

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *