¿Qué es la verdad?

pickBaal HaSulam escribe que, “No existe nada más elevado que la verdad y nada más vil que la falsedad”. ¿Pero cómo podemos saber lo que es la verdad y en dónde encontrarla? Las cosas sólo parecen ser verdaderas en nuestra imaginación y fantasías, pero sabemos que lo que parece ser cierto hoy, resultará ser una mentira mañana.

Eso se debe a que nuestros deseos cambian y cuando eso ocurre todos los hechos que percibimos cambian también. Porque la materia cambia, la forma que estaba presente en la materia ayer ya no es perceptible para nosotros el día de hoy.

Resulta que hoy estamos funcionando conforme a una forma que se reviste en la materia, y consideramos que eso es la verdad. Pero mañana vamos a descartarlo, a decir que era una mentira, dependiendo de lo que veamos mañana. Siempre tenemos que actuar basándonos en el deseo y la forma en que se viste durante el momento en que estamos en esa forma.

No debe preocuparnos que pensáramos distinto hace cien años y que pensemos diferente dentro de doscientos años. Todo será nuevo, tendremos una nueva vida, un nuevo cielo y una nueva tierra.

Se deduce que no tenemos ningún derecho a juzgar a los demás, aquéllos que están arriba o debajo de nosotros. ¿Cómo podemos juzgar a alguien en un nivel inferior si todavía no está corregido? Después de todo, esa persona está en lo correcto en relación a su nivel.

Se nos dan todos los errores, problemas y castigos para “meternos” en una forma revestida en materia, para que no nos separemos de la materia y nos entreguemos al razonamiento abstracto. Es extremadamente importante tenerlo en cuenta mientras estudiamos El Zóhar. Pues, El Zóhar tiene el propósito de llevarnos al mundo espiritual y en ese campo estamos muy tentados a entregarnos a fantasías y misticismos. Nuestro cuerpo realmente lo desea pues de esta forma sufrirá menos.

Tenemos que hacer esfuerzos para mantenernos en tierra dentro del marco de la materia. Si lo hacemos, estaremos realizando una corrección. Es necesario introducir la forma del otorgamiento en nuestra egoísta forma de recepción, pero no encajan una dentro de la otra; son totalmente opuestas y por lo tanto nuestra tarea es extremadamente difícil.

Por eso es que El Zóhar realiza tantos esfuerzos en vigilar lo que nos sucede y las formas que se revisten en nosotros. Después de todo, al separar la materia, podríamos imaginar que ya estamos en el mundo del otorgamiento y el Infinito.

(Extracto de la lección sobre El Prefacio al Libro del Zóhar correspondiente al 24 de diciembre 2009.)

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