“¿Cómo cambiarías si ganaras millones de dólares en la lotería?” (Quora)

Dr.Michael LaitmanMichael Laitman, en Quora: ¿Cómo cambiarías si ganaras  millones de dólares en la lotería?  

Recientemente, en Estados Unidos, cuatro personas ganaron un poco más de un billón de dólares. Fue la tercera lotería más grande en la historia del país y el premio acumulado sigue creciendo. Hay un fenómeno bien conocido, en el que las personas que repentinamente ganan cantidades tan grandes de dinero, tienen altas posibilidades de llegar a la bancarrota. 

Estos ganadores reciben la oportunidad inusual de hacer un esfuerzo por relacionarse con la vida de forma equilibrada. ¿Pueden equilibrar las fuerzas que trabajan en ellos, para lidiar con la tentación de comprar artículos extravagantes e innecesarios? No somos capaces de digerir ni entender completamente tal magnitud de suerte.

   

Suerte verdadera es tener la capacidad de estar dirigido a un estado de equilibrio en cada situación, para constantemente elegir el medio feliz entre intelecto y emoción. A veces somos afortunados en algunos eventos de la vida y desafortunados en otros. Pasa así para que encontremos el punto medio por nosotros mismos, de modo que podemos revisar si lo que recibimos es verdaderamente esencial en nuestra vida.  

No importa cómo le demos vuelta, la suerte existe dentro del sistema de la naturaleza y no importa cuán afortunados somos, seguimos dependiendo del cálculo general en el que todos estamos conectados, en el estado del alma colectiva. En ese estado, las fuerzas operan sobre todos nosotros en un momento dado y no tenemos idea de cómo, por qué, a quién y cuándo surgen ciertos eventos para todo tipo de personas.  

Para atraer más suerte de este sistema, deberíamos querer usar las fuerzas de la naturaleza de forma equilibrada, con el deseo de percibir y sentir ese sistema de manera balanceada y armónica en cualquier momento de nuestra vida. 

Llegamos al equilibrio cuando nuestro intelecto y emociones están equilibradas, es decir, cuando nuestra naturaleza humana (fuerza de recibir) y la naturaleza general (fuerza de otorgar), están en equilibrio, en relación a la vastedad de nuestros impulsos. Al equilibrarnos con la naturaleza, en otras palabras, al adquirir la fuerza dadora, sobre nuestra fuerza receptora innata, nuestra conducta puede servir como ejemplo para relacionarnos en beneficio para los demás. 

Escrito/editado por estudiantes del cabalista Dr. Michael Laitman.

Foto por Dylan Nolte en Unsplash.

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