Cuando escucho la melodía que los amigos cantan juntos – percepción espiritual

Comentario: Cuando escucho la melodía que los amigos cantan juntos, capto algún tipo de vibración. Y si entro con mi mínima vibración, entonces se forma una sensación de algún tipo de volumen, una especie de estéreo.

Mi respuesta: Gracias a tu voz empiezas a escuchar a todos los demás y a percibir toda la gama de sonidos a través de ella. Y si escuchas desde fuera, entonces percibes a los demás no a través de tu voz, no a través de tu participación, sino unilateralmente, no como desde dentro.

Al participar en una acción común, te conectas con todos, y a través de esta conexión sientes la fuerza interior, el significado interno del “canto vocal”, un coro o algún tipo de acción común.

Esta es la diferencia entre los intentos de superar el individualismo en nuestro mundo, es decir, supuestamente conectarse con los demás, pero al mismo tiempo todos están mirando desde afuera, de lo que ofrece la Cabalá, ayudando a una persona a ir hacia adentro, libre de sí mismo, y sentir exactamente lo común, un “no sí mismo”. Aquí una persona tiene que ir a la anulación de sí mismo, a la restricción del “yo” (Tzimtzum Álef).

Comentario: Pero lo siente todo a través de sí mismo. Esto se siente muy claramente cuando todos están cantando.

Mi respuesta: El hecho es que de repente se abren en ti tales rangos, tales sensaciones, tales posibilidades de percepción sutil y todo tipo de conmutación interna, como si de repente entraras por una pequeña puerta en un enorme salón, y en él sonara tal música divina, tal perfección, que comienzas a tratar de encontrarte gradualmente en él a través de acciones de arranque y parada. Este es el primer conocimiento. Naturalmente, esto tira de una persona y la empuja, como un niño.

Comentario: Al mismo tiempo, cada voz por separado puede ser absolutamente terrible e imperfecta.

Mi respuesta: ¡Por supuesto! Realmente es así.

Pregunta: Si grabas este canto, ¿permanece alguna energía en él o solo se siente en el momento de cantar?

Respuesta: Permanece, nada se pierde. Pero nunca se puede volver a lo anterior; siempre se dirige solo hacia una nueva consecución. Aquí no es como el barón de Munchausen “los sonidos se congelaron y luego se descongelaron”. Hay que intentar hacer las cosas de una manera nueva e incluso pensar menos en lo antiguo.

Pregunta: Pero si otra persona escucha este canto, ¿recibirá algún tipo de energía de él, desde su interior?

Respuesta: ¿Cómo se va a enterar? ¿Del hecho de cantar, digamos, juntos? ¿Cantar físicamente? Al fin y al cabo, podemos sentarnos y no cantar, sino simplemente entrar en un estado en el que sintamos lo que tenemos en común.

Una persona debe estar preparada para escuchar. Nada funcionará sin preparación.

 

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