De Babilonia a Roma, parte 8

Sobreponerse a los disturbios entre la gente

Pregunta: En el siglo III dC, el rey egipcio Filadelfo invitó a los sabios judíos a traducir la Torá al griego. Así nace la Biblia. Antes de eso, los sabios le dijeron al rey cómo gobernar correctamente, cómo deberían ser las relaciones entre la gente. De hecho, él tomó sus ideas y quería darles vida en su imperio.  

Pero, después que los judíos empezaron a asimilarse y a adoptar las formas de sus vecinos, los seguidores del rey cambiaron su mentalidad. En particular, Antíoco IV Epifanio, de la dinastía de los seléucidos, primero emitió un decreto con respecto al Templo y la forma de vida de los judíos, pero, cuando empezaron a adoptar las costumbres de los helénicos, surgió una confrontación que condujo a la revuelta de los macabeos. 

Curiosamente, la guerra de los macabeos no se perdió contra los griegos, sino contra los judíos helénicos. 

¿Quiénes fueron? ¿y por qué la guerra se perdió contra su propia gente? 

Respuesta: El hecho es que entre los judíos apareció un gran número de gente que defendía la adhesión a la filosofía, ideología, visión del mundo y estructura social griega.  

Pregunta: Así que, ¿fue ahí donde aparecieron los disturbios entre el pueblo?  

Respuesta: ¡Sólo ahí! Era exclusivamente entre el pueblo. Así surge el dicho: “deja solos a los judíos y se destruirán entre sí”.

Entonces, en el abandono de la ideología de los judíos, yace el antisemitismo. Si estamos desconectados, esta ley se activa y atraemos odio. Una buena actitud hacia nosotros, se vuelve mala.
[261006]
De Kabtv “Análisis del sistema del desarrollo del pueblo de Israel”, 8/jul/19

Material relacionado:
De Babilonia a Roma, parte 8
De Babilonia a Roma, parte 6
De Babilonia a Roma, parte 5

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *