Comentario: Una inmensa cantidad de capital se ha acumulado fuera de la economía mundial; exclusivamente desempeña la función de acumulación de riqueza. Los expertos han sugerido usar esa riqueza para establecer una colonia en Marte. Dicen: «¿Por qué invertir donde estamos? ¿por qué no invertir en otro lugar, como Marte y hacer un gran proyecto global que requerirá recursos humanos enormes»
Mi comentario: O sea, dicen: «No tenemos a donde ir en la Tierra, hemos desquiciado todo aquí, así que es mejor no continuar. Vamos a Marte. Hagamos un gran proyecto de unos pocos billones de dólares e invirtamos todo el capital muerto en él».
¿Por qué? No importa. Seguiremos en el negocio. El único problema es, ¿para qué?
Estoy en total desacuerdo con este enfoque, que demuestra que la gente no sabe en que se debe ocupar la humanidad. La humanidad debe comprometerse en su auto-corrección, en su auto-trascendencia.
Estamos a nivel del mundo animal. El siguiente nivel al que debemos ascender es el nivel de Adam (Hombre), de la palabra Domeh (similar), similar a la fuerza general integral superior. Tenemos que llevar a la humanidad a un estado de unidad general en la que todos juntos seamos un sistema único llamado Adam y así sentiremos el siguiente nivel de existencia, el paso siguiente.
Actualmente, estamos en el marco de los niveles de la naturaleza inanimado, vegetal y animal y en este sentido, somos animales. Tenemos sólo el inicio del nivel superior al que debemos ascender, el nivel de Adam. Podemos llegar a este nivel sólo si nos conectamos en un sistema integral y nos transformamos para ser como la naturaleza general del mundo.
Si lo hacemos, sentiremos el siguiente nivel y veremos el mundo en un estado absolutamente diferente: eterno, perfecto y no limitado por el marco de nuestro cuerpo. Gradualmente desaparecerá de nuestra sensación y sentiremos que existimos sólo dentro de la conexión entre nosotros, que es llamada alma. Este es el estado que debemos lograr.
Pregunta: ¿Usted invertiría todo ese capital «muerto»?
Respuesta: ¡Absolutamente todo! Lo haría para que la humanidad se dotará sólo de lo necesario y todos los demás esfuerzos estarían dirigidos a la conexión entre nosotros, porque así es como comenzamos a ascender al siguiente nivel, llamado Adam.
Así, no habría necesidad de ir a planetas como Marte. No nos dará nada. No encontramos vida en ninguna parte del universo, ni siquiera vida primitiva. Por lo tanto, no hay que correr a ningún lugar a miles de millones de años luz de distancia; no dará nada a la humanidad.
Para calificar para el siguiente nivel, por encima de la velocidad de la luz no será construyendo máquinas físicas, porque la materia no puede moverse más allá de la velocidad de la luz. Pasaremos por encima de ella si adquirimos la característica de otorgamiento, pues está construida si salimos de nosotros mismos; funciona con anti-materia, con otorgamiento en lugar de recepción.
Y así, iremos realmente, no sólo más allá del sistema solar y del espacio, sino más allá de los límites del universo, al siguiente nivel de existencia. Hay condiciones completamente diferentes, otros niveles y hacia allá debemos desarrollarnos.
Al ir hacia al siguiente nivel, nos desprendemos de nuestro cuerpo; deja de existir para nosotros. Viviremos sólo en el poder del otorgamiento, en la conexión entre nosotros, este es el futuro de la humanidad. Y no es ficción porque esa condición fue descrita hace miles de años en la sabiduría de la Cabalá.
¿Para qué necesitamos algún tipo de Marte? Podemos viajar más allá del tiempo, por encima de la velocidad de la luz, al instante, a cualquier punto del espacio, añadiendo todo tipo de espacio y abriendo nuevos mundos. ¡Comencemos este viaje!
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De Kabtv «Noticias con Michael Laitman» 7/sep/16
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