Comentario: Su maestro Rabash escribió en uno de sus artículos que la Klipa (cáscara) es “el deseo de recibir por recibir y esto separa al hombre del Creador. Pues siente que es dueño de su destino y que no hay otro poder en el mundo, excepto él mismo”.
Mi respuesta: El deseo de recibir por recibir es inherente al hombre desde el principio. Nace con ese deseo. El niño recién nacido llega a este mundo con los puños fuertemente apretados, como si quisiera tomar el mundo para sí mismo. Y por el contrario, cuando el hombre muere, sus manos están flojas.
Pregunta: ¿Es el deseo de recibir por recibir la coraza que me restringe de conocer al Creador?
Respuesta: Sí. Es necesario estar seguro de que lo que recibes es en beneficio de los demás, solo para eso.
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