El profesor hace exámenes en torno al reloj

Pregunta: Ayer, durante el taller, sentimos que realmente deseamos mucho alcanzar la meta y que somos completamente incapaces de hacerlo. Pero entonces nos quedó el sabor de la desesperación: no hay recuento de estos estados.

Respuesta: Es cierto. Esto fue lo que sintieron los hijos de Israel en Egipto, una amenaza de permanecer para siempre bajo el dominio de Faraón.

Pregunta: En la vida real, si la persona quiere lograr algo, aprender algo, ella debe aprobar el examen crucial. Y llega al examen en desesperación porque seguramente no lo sabe todo.

Respuesta: Nuestro examen no se basa en el conocimiento. La tarea no se trata de que ustedes den las respuestas correctas, sino del hecho de que ustedes las pidan.

Imaginen que yo soy quien hace el examen. No me hablen del potencial positivo y negativo acumulado durante la capacitación. No traten de ablandarme con la confusión de ustedes. Es necesario que aquí actúen de forma diferente: Si ustedes realmente ven que no hay alternativa, entonces, tomen conciencia de su propia impotencia y disposición para ser cambiados. No hay necesidad de nada más, sólo de estas dos cosas: «Yo no puedo» y «tengo que», y ambas deben tener igual intensidad.

Hasta ahora, ustedes no han obtenido nada del grupo, ni la suficiente demanda, ni la frustración suficiente. Pero ellas son opuestas entre sí y dependen una de la otra: Si ustedes no anhelan la meta, no descubrirán su inaccesibilidad. Ambos polos carecen hasta ahora de poder. Sí, los dos ya han surgido debido a nuestros talleres, sin embargo, el asunto es cómo llenan ustedes el tiempo entre los talleres.

Pregunta: Y aun así, en este mundo, hay una fecha para el examen, que yo conozco de antemano.

Respuesta: El momento de la exploración espiritual viene cuando ustedes sean capaces de aprobarlo. ¿Quieren hacerlo hoy? Por favor. Una vez que estén listos, no hay nada que puede evitar que ustedes lo hagan.

(90918 – De la 4º parte de la lección diaria de Cabalá del 22 de Octubre del 2012, «Matan Torá» (La entrega de la Torá)

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