Fata Morgana

Pregunta: ¿Es cierto que uno puede amar a otro sólo en lo referente al deseo de espiritualidad, porque en este caso, yo no estaría obligado a satisfacer los deseos corporales de otras personas? Después de todo, veo claramente que ahora no estoy ni siquiera dispuesto a compartir un pedazo de carne en la mesa.

Respuesta: Por el momento, es suficiente que nos unamos en nuestro deseo de alcanzar al Creador, pero más tarde, usted se sentirá como si estuviera sentado al lado de su pequeño hijo en la mesa. ¿Sería capaz de tomar su porción de carne y comerlo? Así es como usted va a tratar a todo el mundo.

 ¿Pero por qué es esto necesario o que recibirá usted al final? Por lo general olvidamos la respuesta a esta pregunta, es decir, el propósito de otorgar, y es por eso que esta acción se siente tan artificial para nosotros: Usted se sentirá similar al Creador y le otorgará placer a Él, después de haber llegado  a tal gran corrección.

 Actualmente usted no tiene en absoluto ninguna necesidad de esto, y es por eso que un acto de otorgamiento se ve forzado y poco razonable para usted. Sólo hay un objetivo: asemejarse al Creador. Sólo le parece a usted que el mundo está sufriendo, que hay gente pobre y desafortunada. Pero una vez que usted se corrija, verá que son todos ricos y felices, inteligentes y sanos (ver el artículo de Baal HaSulam, La Revelación y Ocultamiento del Creador).

No podemos comprender lo que es una ilusión de todo el sufrimiento en el mundo. A cada persona se le muestra un mundo feo a propósito para que pueda sentir que necesita corregir para ver la perfección. Vemos cómo todos piensan diferente y tienen su propia opinión, ¿pero de dónde viene? Es el resultado de que todos ven una imagen diferente del mundo porque no hay imagen o forma: Todo se revela en las propiedades de una persona.

Cuando empiezo a desplegar la verdad, me doy cuenta que detrás de todas las imágenes del mundo que aparecen ante mis ojos como un espejismo en el desierto, sólo se sostienen en un Pensamiento que proyecta la realidad que actualmente vemos. Y esta forma es tan vaga,

como Fata Morgana que se eleva en el aire y está cambiando constantemente.

Puedo gobernar mi camino a través de todas estas fantasías y lo desconocido sólo apoyándome en el grupo, ya que constantemente corrige mi enfoque hacia la verdad. La verdad es la obtención de la única fuerza que gobierna todos los Fata Morgana.  Al alcanzar esta fuerza, podemos comprender cómo crea todas estas formas y por qué podemos volvernos  uno con ella, y trabajar juntos para revelar la verdadera imagen de este mundo.

 Está escrito: «Un hombre dará cualquier cosa por encontrar la verdad».

 (22930 – De la cuarta parte de la lección diaria de Cabalá del 3 de octubre de 2010 El amor al Creador y el amor a los seres creados.)

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