Pregunta: Cuando hablamos de la unidad de la nación de Israel, ¿hasta qué punto podemos ampliar este concepto?
Respuesta: Este incluye a todos los judíos. Después de todo, ellos son los descendientes del grupo que Abraham tomó sobre sí mismo como un todo, «como un hombre con un corazón». Éste no es un asunto de religión, los judíos simplemente tienen unas Reshimot, genes espirituales, porque ellos ya cumplieron la garantía mutua en el pasado. Podemos decir que después del exilio de la nación judía y de su mezcla con otros, estas Reshimot ahora existen en todos. Esto es cierto, y aun así, ésta es la obligación de la nación israelí.
Las personas con un punto en el corazón que tira de ellos hacia arriba (•), sin importar donde vivan, se unen a la organización Bnei Baruj (BB). También hay una parte que se llama «Israel en este mundo» o «judíos», quienes en este momento tienen «Reshimot silenciosas», puntos en el corazón (•) que aún no han despertado, las cuales, por el contrario, jalan de ellos hacia abajo.
Después de todo, están usando la fuerza de otorgamiento, a fin de tener éxito en sus relaciones en este mundo.
Por último, hay una parte que se llama las «naciones del mundo»: ellos tienen un punto en el corazón (•) aún más profundamente oculto y que difícilmente puede notarse, el cual los jala incluso todavía más abajo. Como resultado, las personas con puntos en el corazón que han despertado, son atraídos hacia la corrección por sí mismos, las personas que pertenecen a «Israel» deben ser corregidas, y las «naciones del mundo» se queda en un estado que no puede envidiarse, es decir que ellas dependen de los niveles que están por encima de ellas, los cuales son responsables de la corrección.
Es por eso que necesitamos difundir la sabiduría de la Cabalá entre la nación israelí. De lo contrario, guardaríamos silencio como cabalistas de las generaciones anteriores. Una nueva era ha comenzado y aunque la difusión sea una carga que ninguno de nosotros quiere, no tenemos otra opción. Baal HaSulam escribió sobre esto en el artículo «El Shofar del Mesías», en el diario La Nación, y en otros lugares.
Pregunta: ¿Cómo será el desarrollo del resto de las personas a partir de la segunda capa?
Respuesta: Ellos no van a poder hacer nada por su propia cuenta; tendrán que unirse a nosotros y aprender a ayudarnos activamente. Ellos entenderán en su mente y en sus sensaciones que deben participar en la corrección. Su punto en el corazón aún no se ha despertado y ellos son conscientes racionalmente de la necesidad de esto, simplemente porque de lo contrario hay problemas.
Entonces ellos se volverán hacia nosotros: «¡Tenemos que unirnos, ayúdennos a hacerlo!» Y nosotros les ayudaremos. Ellos no aspiran al Creador, sino a una vida segura. Nosotros somos jalados hacia arriba por un deseo, mientras que su deseo es arreglárselas en este mundo, sin embargo, al mismo tiempo son capaces de unirse. Sólo posteriormente se despertará en ellos chispa espiritual, y también en las «naciones del mundo». Después de todo, se nos dice que al final de la corrección, todos ellos conocerán al Creador desde el más pequeño hasta el más grande.
Así que todo depende de nosotros, es decir, de nuestra difusión hacia Israel y de la medida en que nosotros mismos estemos unidos. Esto es lo que Baal HaSulam dice en su artículo «El Shofar del Mesías»: La difusión de la sabiduría a las masas es llamada «Shofar». Al igual que el Shofar, cuya voz viaja grandes distancias, el eco de la sabiduría se extenderá por todo el mundo, así, incluso las naciones escucharán y reconocerán que hay una sabiduría divina en Israel».
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De la 4º parte de la lección diaria de Cabalá del 12/3/12, «Exilio y redención»