La Torá, «Levítico» (Ajarei Mot), 18: 6: Ninguno de ustedes se acercará a algún pariente cercano para descubrir su desnudez. Yo soy el Señor.
Hay una clara separación entre las partes masculina y femenina en el sistema espiritual que desciende desde Arriba: la Luz de Jassadim (madre) y la Luz de Jojma (padre).
La Luz de Jojma desciende a través del padre y la Luz de Jassadim desciende a través de la madre. Ellas pueden entrecruzarse en forma de niños, pero sólo en una cierta combinación y no al azar.
La combinación puede ocurrir cuando una cierta cantidad de la Luz de Jojma entra en la Luz de Jassadim, que esta puede contener. Esto significa que el atributo de otorgamiento tiene que estar en la cantidad que puede contener la Luz de Jojma: el placer con el fin de otorgar, un llenado en aras de la difusión.
Esto se debe a que cada acción tiene que ser para el amor, para el otorgamiento, y para la corrección de los demás de acuerdo a la regla de «ama a tu prójimo como a ti mismo». Todo está dirigido hacia el otorgamiento, dado que el alma de la persona es externa a ella.
Las acciones que están dirigidas hacia mi propio beneficio y que exceden la medida necesaria para mi existencia no son válidas, no son Kosher, y destruyen de inmediato las almas. Entonces, la persona tiene que avanzar dentro de ciertos límites y entender que sólo puede alcanzar un cierto límite y no más. ¿Cómo puede mostrársele esto de antemano? Hay un sistema espiritual que desciende desde Arriba, a fin de habilitarla para que pueda enfocarse correctamente sólo en el otorgamiento y avanzar correctamente, puesto que ella entiende los límites de las opciones que tiene, y para determinarlos de forma independiente y utilizarlos libremente.
Este tiene que enseñarnos y mostrarnos las opciones que tenemos. Cuando le enseñamos a un niño, nosotros le mostramos qué está permitido y qué está prohibido, qué es bueno y qué es malo. Primero le mostramos al niño algo y luego queremos que no sólo lleve a cabo lo que le mostramos, sino que además de medio paso hacia adelante. Del mismo modo, el sistema espiritual debe enseñarle a la persona las habilidades por medio de las cuales puede avanzar de forma independiente. Así, el sistema de Adam (ser humano) tiene que desarrollarse de forma independiente.
En nuestro mundo nosotros nos desarrollamos sólo por medio de los golpes y castigos. Vemos que la humanidad se equivoca constantemente y no puede actuar correctamente porque crecemos en nuestro ego. Tales errores son imposibles en el mundo espiritual.
Con el fin de proteger a la persona en su crecimiento espiritual, tiene que crearse en ella un sistema de autoaprendizaje, no del tipo que generalmente se crea de arriba hacia abajo, sino de abajo hacia arriba, en el que la persona todavía no sabe qué hacer. Esto sólo es posible en el mundo espiritual, gracias a sus atributos.
La palabra prohibido en la Torá significa imposible. La prohibición del incesto entre los familiares significa que es imposible crear parte del alma en esta combinación, ya que cada acción que hacemos es una corrección consistente de otra parte del alma.
Es imposible corregir cierta parte por medio de esta acción, debido a que así se forma la vasija que no es apta para la corrección. La Luz desciende desde arriba en dos líneas. Una de ellas es una parte llamada padre y la otra llamada madre y que pueden combinarse sólo en ciertos niveles.
La combinación debe estar entre las señales que están absolutamente desconectadas que descienden de una sola parte del sistema. En otras palabras, el atributo de otorgamiento y el atributo de recepción tienen que renovarse constantemente en las partes totalmente nuevas del alma. El acercamiento de forma idéntica, lo cual surge de una fuente superior, es imposible.
Pregunta: ¿Hay un ejemplo de ello en nuestro mundo?
Respuesta: Por supuesto. Todo lo que existe en el mundo espiritual, en forma de raíces, se revela en nuestro mundo en forma de sus derivados. Por lo tanto, existe la prohibición del incesto entre un padre y una hija, una madre y un hijo, etc.
Estos derivados existen en nuestro mundo y conducen a resultados negativos. Los problemas psicológicos y mentales causados por el matrimonio de los familiares de los monarcas europeos y sus descendientes son bien conocidos.
El incesto es sólo posible en el nivel de los animales, pero la descendencia de los animales se separa totalmente de su madre y la conexión biológica, genética con los padres desaparece. Varios años más tarde que pueden entrar fácilmente en contacto uno con el otro, sin darse cuenta de que son parientes.
Esto es imposible en un ser humano, dado que él está conectado con la Luz Superior, mientras que los animales están en un nivel inferior.
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Del Kab.TV «Los secretos del Libro Eterno» del 3/19/14