Lo más importante se encuentra al final

Dr.laitmanBaal HaSulam, «Introducción al Libro del Zóhar», ítem 64: …con respecto a la sabiduría de la Torá, esta se revela cada vez más en las últimas generaciones. Esto es así por la razón que he mencionado, que la medida general la completan específicamente los últimos. Esto se debe a que las Luces más completas se extienden hacia ellos, aun cuando su propia esencia sea mucho peor.

Esto surge del orden inverso entre las vasijas y las Luces. Mientras más puras y refinadas son las vasijas, menos Luz está en ellas, aun cuando esas vasijas sean expresadas y corregidas por las vasijas que las preceden. Y por el contrario, mientras más grande y profundo el «grosor» de las vasijas, más difícil es corregirlas. En contraste con esto, las Luces en ellas son más grandes y se revelan por medio de su conexión.

Esas Luces se invisten específicamente en las vasijas más finas y refinadas, dado que las Luces son implementadas en el orden de NRNHY, mientras que el orden de la corrección de la vasija es KHB ZON. En otras palabras, las vasijas se revelan de Keter a Maljut, desde la más elevada hasta la más baja, mientras que las Luces son lo opuesto, de Nefesh a Yejida, desde la más pequeña hasta la más grande. Están vinculadas entre ellas en esa secuencia.

Este principio no es simple y nos confunde y es muy difícil que entendamos las relaciones recíprocas dentro del sistema en general, en cada mundo y entre los mundos. Algunas veces necesitamos aceptar esto simplemente como una regla general, como una ley, hasta que gradualmente «se establece» y se integra con nuevas vasijas internas. Y sólo después de que persona siente la esencia, comienza a entenderla. Al principio la sensación llega dentro de las vasijas corregidas hasta un grado particular; después de eso, viene la comprensión. Entonces el intelecto siempre sigue a la sensación.

Las personas que no están vinculadas con la esencia interna de la Torá y son guiadas por su intelecto externo no entienden este principio y por lo tanto no ven la cualidad única de nuestro tiempo y generación. Ellas están familiarizadas con el proceso de deterioro general; pero junto con esto, se evaden la responsabilidad de corregir el mundo. Suponen: «Si ya nos hemos deteriorado tanto, entonces todo lo que nos queda es esperar la llegada del Mesías».

Pero esto no es correcto. Nuestra generación es la más importante para la meta general. Y a pesar de estar doblados bajo la pesada carga de nuestro ego, está destinada a que trabajemos en esto y no nos deshagamos de ello. A través de un trabajo así, atraemos grandes Luces para las almas más elevadas que están comenzando a corregir a la humanidad, y esas almas son Adam, Abraham, etc. y nosotros recibimos una delgada y pequeña Luz de acuerdo a nuestro lugar en el sistema general, y podemos avanzar de esta manera hasta alcanzar las diez Sefirot completas de toda la creación.

Entonces, de hecho, llegamos al alcance y entendemos qué trabajo tan difícil hemos llevado a cabo. Incluso si fuéramos a cometer un error y estuviéramos confundidos, aunque no tuviéramos éxito en resolver e interpretar, aunque hubiéramos errado y desacatado, esto no es importante. De otra manera es imposible. Al final todo llegará al análisis correcto, a la verdadera cuenta, y sólo entonces, en el nivel más elevado, podemos evaluar correctamente nuestro estado y discernir su importancia. Y mientras tanto, depende de nosotros el proceder con «fe por encima de la razón» y creer en Baal HaSulam quien escribió que las primeras generaciones eran importantes a causa de sus refinados deseos, mientras que nosotros somos importantes por nuestro «espesor».(128454 )
De la 2° parte de la lección diaria de Cabalá del 2/27/14, Escritos de Baal HaSulam

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *