Oposición a la unidad, parte 6

Si no hay acercamiento de corazón a corazón 

Pregunta: Cuando hay una sociedad fuerte, en la que los valores, como garantía mutua, solidaridad y unidad están por encima de todas las prioridades, no hay problemas con integración ni con matrimonios mixtos pero, cuando falla, ¿es necesario al menos mantener a la gente en un marco externo, para preservarla como nación? 

Respuesta: ¿Cuando se cae en el egoísmo y se deja de sentir el mundo superior -las conexiones más elevadas entre todos-, se requieren conexiones materiales. 

Pregunta: ¿Esta solidaridad convirtió a los judíos en nación? 

Respuesta: La comunidad creada por Abraham, yace en el parámetro “ama a tu prójimo, como a tí mismo”. No se requirió ningún marco externo porque la gente se sentía conectada de cualquier forma. 

Pregunta: ¿Resulta que no había mandamientos?

Respuesta: Ama a tu prójimo como a tí mismo, este es el mandamiento y el único. Por eso, se le conoce como el principal mandamiento de la Torá. No se requiere nada más. 

Pregunta: Pero, ¿cuando la solidaridad comenzó a desaparecer, aparecieron los mandamientos, que se cumplen en el nivel físico, dentro del marco externo?  

Respuesta: Si. No vayas ahí, no hagas esto, no dañes a los demás, etc. Es decir, aparecieron las leyes de conmutación entre la gente, porque ya no podía aproximarse uno a otro, de corazón a corazón.
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De Kabtv “Análisis del sistema del desarrollo del pueblo de Israel,” 29/jul/19

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