Pregunta: ¿Por qué la Luz trabaja tan lentamente sobre nosotros? ¿Qué más podemos hacer?
Respuesta: nosotros estamos avanzando a grandes pasos. Sin embargo, no podemos medir cuántos pasos más tenemos nosotros que tomar con el fin de intercambiar nuestra percepción desde el consumismo interno al otorgamiento, para atraer la fuerza que vinculará las «ruedas dentadas«, nuestras almas, juntas, y por tanto que nos deje sentir el mundo superior.
Ni yo, ni nadie en el mundo, incluyendo todos los cabalistas de las generaciones anteriores, alguna vez han experimentado el estado que estamos pasando hoy en día. Nunca antes un grupo tan grande de personas se han esforzado hacia la corrección final, basados en la carencia de conexión entre ellos, así como sobre la falta de la relación con el Creador en ellas. Puesto que no hay ningún precedente de esto, yo no puedo decir en qué forma va a ocurrir.
En verdad, en la sabiduría de la Cabalá, todo es idéntico a la naturaleza. Si algo no es revelado, no puedes saber cómo se manifiesta. Un verdadero científico dirá que de acuerdo con sus datos, puede ocurrir de esta manera o de aquella otra, pero si él da un paso adelante, da un paso hacia lo desconocido.
Existen científicos que invierten décadas estudiando algún fenómeno y tienen la certeza que han encontrado una explicación de cómo funciona. Sin embargo, de repente dicen, «no, estábamos equivocados» y empiezan todo de nuevo.
Lo mismo es verdad en relación con la sabiduría de la Cabalá. Esta es una ciencia. Tenemos que explorar el mundo superior por nosotros mismos y no esperar un correo electrónico, mensajes de texto, o algo más desde ahí. Todo lo que ha sido revelado hasta este momento, se expande en Kelím (vasijas) individuales y personales de cada cabalista.
Ahora, tenemos que descubrir el mundo superior en este enorme deseo colectivo, en nuestra unificación mutua. Y esto será hecho por primera vez. Todos los 7 millones de personas podrían no unirse, pero allí todavía habrá cientos de miles o incluso millones.
En otras palabras, el anhelo por ver el mundo espiritual se ha vuelto colectivo en vez de individual. Esto nunca se había visto en el pasado. Por tanto, es imposible saber cuándo ocurrirá, pero nosotros estamos avanzando a un ritmo rápido.
(32949 – De la lectura del Día de la Unidad del 26 de Diciembre2010)
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