“¿Quiénes están en el error y en lo correcto acerca del conflicto Israel-Palestina? ¿es mucho más complejo?” (Quora)

Michael Laitman, en Quora: “¿Quiénes están en el error y en lo correcto, acerca del conflicto Israel-Palestina? ¿es mucho más complejo?” 

La solución al conflicto Israel-Palestina, está en las manos del pueblo de Israel.  

Para entender por qué el pueblo de Israel tiene la solución en este conflicto en marcha, necesitamos entender su misión y la retroalimentación que recibe desde su conciencia —o falta de conciencia—respecto a esa misión. 

Las raíces del pueblo de Israel se pueden trazar 4,000 años atrás, en la antigua Babilonia, cuando gente de distintas partes de Babilonia se reunió bajo la guía de Abraham. Abraham les condujo para alcanzar un estado especial de unidad, de acuerdo al principio, “Ama a tu prójimo como a tí mismo”. En otras palabras, las raíces del pueblo judío son ideológicas, no biológicas y contrarias a las distintas naciones, siempre hay un cuestionamiento sobre este pueblo.

La antigua Babilonia se caracterizó por una sociedad que se separó debido al ego desbordado, los que se reunieron con Abraham, sentían cierta necesidad de superar las divisiones sociales del momento.  Cuando se unieron para tener relaciones de amor mutuo, adquirieron el nombre de “pueblo de Israel”, “Israel” viene, “Yashar Kel” (“directo a Dios”), es decir, el principio característico de este grupo fue su inclinación a buscar directamente a la fuerza positiva de amor y otorgamiento que habita en la naturaleza y con estados cada vez mayores de unidad que adquirieron, revelaron la fuerza en sus conexiones. 

Dado que el pueblo de Israel, una vez alcanzó el nivel de unidad por encima del ego creciente de la antigua Babilonia y después, bajo la guía de Moisés, lo logró una vez más, las naciones del mundo inconsciente esperan que el pueblo de Israel se una de nuevo con amor mutuo y sea el conducto positivo de unidad que sirva a la humanidad. Cuando más pueblos se sientan unidos con lazos de amor en su conexión, serán más felices, seguros y con más confianza. En oposición, si están en odio y división, más crisis sienten en su vida, en distintos niveles -personal, social, económico y ecológico- y cuando aumenta el sufrimiento en la humanidad, el odio hacia el pueblo de Israel también crece, ya que existe una dependencia inconsciente de este pueblo, donde la felicidad o el dolor de la humanidad, dependen de Israel.  

Como tal, los palestinos son una de muchas naciones que ven negativamente a Israel. En respuesta al creciente odio en su contra, el pueblo de Israel necesita volver a despertar su capacidad de unidad que ha sido olvidada por tanto tiempo.  

Primero, necesitamos relacionarnos con respecto a la razón más profunda detrás del odio hacia Israel: que las crisis multifacéticas que la humanidad está experimentando, pueden resolverse al mejorar las relaciones humanas con más unidad, por encima de los impulsos divisivos crecientes. Inconscientemente, todos esperan que el pueblo de Israel se una, como lo hizo una vez, por encima de su división y que sea conducto para que la unidad que se esparza por el mundo, es decir, ser “luz para las naciones”. 

También necesitamos conocer el problema que ni judíos ni no judíos, saben de esta profunda causa, más allá de sus dolores, ya que es una base ideológica que se perdió hace alrededor de 3,800 años, en una era marcada por  división y odio creciente en nuestra sensación, no tenemos ni idea de cómo unirnos positivamente. 

Dado que carecemos de cualquier sensación o experiencia del tipo de unidad que alcanzaron alguna vez nuestros ancestros, no sentimos carencia por la unidad, como no sentimos que nos falte un sexto dedo en la mano. Simplemente no vemos que si nos unimos, resolveremos, no sólo el conflicto israelí-palestino, sino que nuestra unidad tendrá un efecto dominó positivo para toda la humanidad, se resolverán una miríada de otros problemas que  parecen no tener solución.  

El pueblo de Israel no tiene oídos para este mensaje. Aquellos que lo entienden, los cabalistas, son muy pocos y así no hay solución a la vista, a ninguna escala masiva.  

La solución está únicamente en que el pueblo de Israel escuche lo que las naciones del mundo quieren de él: que implementen la unidad que las naciones del mundo claman detrás del sentimiento anti-israelí y las amenazas y crímenes antisemitas.

Si lo hacemos nos encontraremos en una vida de bondad y paz.

Video disponible en inglés

Escrito/editado por estudiantes del cabalista Dr. Michael Laitman.

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