«Un hombre endeudado sigue siendo un esclavo»

Opinión (John Perkins, economista en jefe de una de las principales firmas de consultoría en economía, ex consejero del Banco Mundial, de las Naciones Unidas, del Fondo Monetario Internacional, del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, de las 500 corporaciones de Fortune, autor de Confesiones de un francotirador económico): «Mi trabajo como francotirador económico durante los 70’s era esclavizar a las naciones que tuvieran recursos que nuestras corporaciones pretendían, al agobiarlas con deudas que nunca podrían pagar. Después exigíamos que vendieran esas recursos a un precio bajo, sin regulaciones sociales ni ambientales, a nuestras corporaciones».

«Era una estrategia increíblemente efectiva. En esencia esto creó el primer imperio realmente global y el primero que no fue construido principalmente a través de ocupaciones militares. También transformó la geopolítica. El poder de las autoridades elegidas fue usurpado por los que se sientan en la cima de las corporaciones multinacionales (la «corporatocracia»)».

«Este éxito los llevó a darse cuenta de que podían aplicarse estrategias similares en los Estados Unidos con el fin de «castrar» a la población que estaba ejerciendo sus derechos democráticos en maneras que amenazaban el poder de las corporaciones…»

«Para 1980, la administración Reagan entendió que su arma más efectiva para proteger a las corporaciones en contra de los movimientos laborales, era la deuda. Los deudores fueron engañados para que creyeran que estaban pagando tasas bajas de interés, cuando en realidad los pagos  por periodos muy extendidos, las tasas ajustables para la hipoteca, y otros paquetes técnicamente complejos, resultaron en general en tasas más altas que hicieron cada vez más difícil romper el yugo de la deuda…»

«Finalmente hemos caído en cuenta de que somos siervos de un sistema que refleja los feudos de la edad media. Los nobles del castillo moderno, de «la corporatocracia», nos han convencido de que vivimos fuera de las murallas y que les proporcionamos toda la comida y servicios, que si no pagas tus «deudas» y les sirves en cada uno de sus deseos, serás violado y saqueado por soldados de castillos vecinos. Pero nosotros ya no creemos en sus mentiras».

«En todo este planeta, hemos marchado en las patios de esos castillos con el mensaje de que ya no estamos ciegos. No seremos cegados por sus falsas promesas o por sus tácticas. El movimiento Occupy abarca siete continentes, La participación se expande a un ritmo aparentemente exponencial, tanto en la red como en otros frentes…»

«La corporatocracia está contraatacando. Están escribiendo nuevas leyes prohibiéndonos las reuniones en lugares como Wall Street. Están intentando censurar el Internet (como lo hicieron en Egipto). Se les ocurrirán planes que ni siquiera podemos imaginar».

«Cada vez que hagan esto, debemos utilizar su energía para que nos inspire y nos dé más poder. Viniendo de un lugar en el que sabemos que tenemos razón, debemos usar las artes marciales del amor, la compasión, y cooperación para continuar expandiendo nuestra energía, nuestra resolución, y nuestras respuestas creativas».

Mi comentario: El método para esclavizar puede variar, pero no desaparecerá hasta que la naturaleza egoísta humana sea corregida. Es por eso que todos los movimientos Occupy no resultarán en nada y se desvanecerán. La salvación está en la educación de las personas, en su corrección a través de la fuerza oculta de la naturaleza: esta creó el egoísmo y también puede corregirlo.

La esclavitud viene de su fuente histórica y espiritual: El Faraón que tenía a los judíos como esclavos. El Faraón representa todo el egoísmo universal, es por eso que él quería vencer incluso a la muerte a través de la momificación. Una persona así es esclava de su egoísmo y sigue siendo su esclava hasta que comience a corregirse a través del método de formación integral.

Así que hoy, en la crisis actual, es el momento de liberarme del Faraón, del egoísmo, junto con el mundo entero.

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