Una nueva vida #489- ¿Las estrellas afectan nuestro destino?

Dr Michael Laitman

Una nueva vida #489 – ¿Las estrellas afectan nuestro destino?
El Dr. Michael Laitman en una conversación con Oren Levi y Nitzah Mazoz

Pregunta: El asunto de la astrología y el destino es muy interesante, intrigante y muy poco claro. ¿Las estrellas afectan nuestro destino? ¿Es posible predecir nuestro destino? ¿Cómo podemos usar esta información? Después de todo, lo más dificil de la vida es que es impredecible. Vamos por la vida sin tener idea de qué nos sucederá en el futuro y qué sorpresas nos tiene reservadas el destino.

Una persona no puede controlar su vida. Esta es la razón de que tantas personas estén interesadas en la astrología, la cual aparentemente puede predecir el carácter de una persona y su destino de acuerdo a diferentes señales.

La astrología fue muy popular en el antiguo Egipto, la antigua Grecia, el lejano Oriente, India, China y también entre los nativos americanos. Incluso hoy muchos creen que existe una conexión entre las estrellas y el estado de una persona. ¿Existe realmente una conexión así?

Respuesta: El universo se desarrolla gradualmente, paso a paso, y el hombre es la última fase de este proceso evolutivo y es la parte más desarrollada. Pero es en realidad porque el hombre es la criatura más desarrollada y tiene una mente y sentimientos mediante los cuales puede explorar la naturaleza más y más, que él siente que es vulnerable.

Se dice “un cordero de un día es llamado un buey”. Después de todo en el momento en que nace el cordero ya tiene mente y sentidos como un buey adulto. Sabe qué plantas puede comer y cuáles no debe comer; no se dejará caer de un lugar alto, a diferencia de un niño que tiene que ser educado y enseñado por un largo tiempo hasta que se hace sabio.

Si no le enseñamos a un niño, crecerá para ser un animal. Pero si le transmitimos toda la experiencia humana que ha sido acumulada por muchos años él llegará al nivel humano, el nivel hasta el que se le permitirá desarrollarse. Una persona se desarrolla y de acuerdo al nivel al que se desarrolla él descubre el mundo.

Por lo tanto el hombre es una criatura muy sensible, dado que tiene que sentir la naturaleza de forma muy profunda. Es fuerte en ser capaz de construir diferentes sistemas que lo ayudan a lidiar con la naturaleza. El hombre ha aprendido a controlar el fuego, ha descubierto la electricidad, ha aprendido a calentar su casa e iluminar la oscuridad de la noche. Ha aprendido a comunicarse a grandes distancias y ha inventado el internet. El hombre se ha vuelto cada vez más sofisticado y ha añadido a la naturaleza toda la comodidad de la que carecía. Al mismo tiempo no ha cambiado mucho. Existen probablemente límites muy claros para la habilidad humana.

Podemos mejorar nuestra vida diaria de muchas maneras, pero no podemos responder la pregunta más importante: ¿Cuál será mi destino? ¿Cuál será mi futuro? ¿Qué sucederá cuando muera? ¿Qué había antes de que naciera y que me sucederá después de que muera? ¿Qué sucede más allá de las fronteras de esta vida?¿Por qué he conocido a las personas que me rodean en mi vida?¿Por qué nací con cierta personalidad, como hombre o como mujer, en un cierto país, en una cierta época?

Todas esas preguntas siguen siendo un misterio para nosotros. Existe una cierta fuerza que nos controla y no podemos influir en ella. Sólo podemos tratar de vivir de forma comfortable en el lugar al que nuestro destino nos ha llevado: construir casas en lugar de cuevas, preparar comida y almacenar productos.

Nosotros desarrollamos lo que pertenece a la existencia corporal, es decir que usamos la mente y sensaciones humanas que nos elevan por encima de los animales por el bien del nivel animal, por el bien del cuerpo. Es sólo para beneficio del cuerpo que hemos desarrollado todas las ciencias: física, química, biología y zoología, para que nuestro cuerpo pueda disfrutar.

Pero no podemos usar nuestra mente y nuestras sensaciones con el fin de salir de nuestro cuerpo. Resulta que usamos todo lo que se nos dio más allá del nivel animal-nuestra alta inteligencia, la habilidad de explorar la naturaleza y descubrir sus leyes-sólo para el bienestar de nuestro cuerpo corporal.

Queríamos movernos rápido, entonces construimos un carro; queríamos hablar con alguien que está muy lejos, entonces inventamos el radio y el internet. Pero todas esas invenciones son para la comodidad de nuestro cuerpo, en aras de nuestra salud, para nosotros mismos y para nuestros hijos.

No existe ninguna invención que haya surgido de nuestra mente que fuera para el nivel que está más allá del nivel animal. Universidades, mercados de valores, museos, todos están hechos para proporcionar a nuestro cuerpo la máxima comodidad. Es triste ver cuán primitivamente usamos nuestras delicadas sensaciones, nuestras agudas mentes y nuestra habilidad para desarrollarnos mientras evolucionamos de una generación a otra.

Volamos al espacio exterior y tenemos grandes logros en medicina. Hace cien años la expectativa de vida promedio era de no más de 40-50 años, y hoy nos acercamos a 100. En otros 50 años podríamos vivir 200. Tenemos la habilidad de hacer nuestra vida en este mundo mucho más intensa, más sana y extender la vida del cuerpo. Pero lo que aún no queda claro es qué debemos hacer con el cuerpo durante tantos años.

Podemos mejorar las condiciones en las que vive el cuerpo por el bien de nuestras familias y nuestros hijos. Podemos responder de forma práctica cualquier pregunta excepto la pregunta más importante acerca de nuestro destino. El término “destino” incluye lo que éramos antes de nacer, qué seremos después de morir, qué nos pasará en el medio, en el tiempo desde el nacimiento hasta la muerte, y con qué dificultades tendremos que lidiar durante este tiempo.

Por una parte, nos damos cuenta que todo está predeterminado, pero para nosotros es revelado como completo azar. Hoy nos parece una coincidencia pero, ¿y si pudiera elevarme un poco y observar el plan completo de la creacion? Esto es muy intrigante.[151363]
De Kabtv “Una nueva vida #489 – ¿Las estrellas afectan nuestro destino? 1/ene/15

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