Si continuamos con la explicación de cómo alcanza la persona al Creador a través de los amigos, entonces, de hecho esas palabras se repiten, porque no tenemos tantas palabras para expresar estas acciones. Esto es a pesar de que éstas difieren en gran medida en cualidad y diversidad. Este amplio rango de emociones que no existen en nuestro mundo está abierto, por lo tanto nuestro diccionario no está preparado para transmitirlas.
Durante el ascenso, nosotros pasamos a través de 125 niveles, un número infinito de pequeños estados. Todos los estados son emociones absolutamente diferentes, pero se expresan por medio de la misma palabra: Por ejemplo, «felicidad», «decepción», «ira», «injuria» y «celos» Es posible contar varias docenas de palabras de este tipo, pero todas ellas son idénticas, comenzando desde el más pequeño paso hasta el más grande. Por lo tanto, los cabalistas lo clasifican todo por medio de números: La profundidad del deseo de recibir (densidad), la altura de los niveles de alcance, y de esta manera ellos entienden lo que se está diciendo.
Si yo expreso una coordenada espiritual, entonces otro cabalista sabe de qué estoy hablando, porque él recrea esto dentro de sí mismo. Esta es precisamente la forma en que un músico le dice alguna nota a otro músico, y esta nota resuena en su interior. Para una persona común que no estudió música, esta nota no le dice nada; mientras que el músico la escucha dentro de él y la entiende. Esa también es la forma en que los cabalistas entienden el lenguaje de la Cabalá.
Yo espero que en un futuro próximo, en vez de expresar nuestras emociones con palabras, las expresemos junto con ustedes a través de términos cabalísticos, y las transmitamos a los demás de esta forma, sintiéndolas simultáneamente. Nosotros estaremos unidos por nuestras sensaciones y descubriremos las emociones dentro de esta unidad.
En nuestro mundo no existe algo como esto. Sólo nos parece a nosotros como si nos sintiéramos unos a otros, pero en realidad no entramos unos dentro de los otros porque no tenemos la característica del otorgamiento. Simplemente, reaccionamos más o menos apropiadamente y sentimos una situación similar porque fuimos creados como animales similares. Pero no estamos preparados para comparar nuestras comprensiones y desde luego no estamos preparados para conectarnos con nuestras sensaciones y emociones.
Pero cuando nos conectamos con la característica del otorgamiento, entonces ocurre un fenómeno sorprendente: Ya no nos sentimos dentro de nosotros, sino dentro de nuestra unidad compartida. ¡Allí interpretan la misma sinfonía para todos! Al estar unidos dentro de ella, nosotros sentimos las emociones de todos los oyentes, a pesar de que, al mismo tiempo, cada uno esté sintiendo esto dentro de sí mismo. Nosotros todavía no podemos entender esta «dualidad» de comprensión espiritual, pero es así.
En conclusión, sin el grupo no es posible realizar ningún movimiento espiritual. Y un grupo no significa que solamente nos encontramos de manera física en un lugar. Un grupo son aquellas personas que comparten una comprensión de lo que yo ahora estoy tratando de explicarles. Por lo tanto, los cabalistas dedican mucho tiempo y atención a la creación del grupo.
(110051 – Del día tres, Convención en Krasnoyarsk del 6/16/13, Lección 5)