El centro del grupo no está en ninguno de los miembros del grupo, está entre todos ellos. Si todos tratáramos de unirnos de tal manera que nos sintiéramos a todos juntos como un todo único, este sería el centro del grupo, el punto de conexión total entre nosotros.
Pregunta:
Para concentrarnos en el centro del grupo durante un taller, ¿necesitamos representar este estado que nos ha descrito?
Respuesta:
Sí, por supuesto. Cuando nos conectamos, el «yo» personal desaparece y permanece «nosotros» en lugar de «yo».