Una pregunta que llega de todas partes del mundo ahora: ¿Cómo podemos alcanzar la conexión correcta en la próxima convención y recibir una influencia positiva del entorno?
Respuesta: Cada persona viene sin obligaciones. No existen presiones. Lo más importante es sentirse tan libre como sea posible. Vengo a la convención habiendo dejado todas mis preocupaciones detrás. Cuando me encuentre allí, será como si no tuviera ningún problema. Es necesario prepararse como para ir a un día de campo, sin ninguna preocupación en la mente.
Por supuesto es bueno aprenderse las canciones y familiarizarse con la preparación en el sitio de la convención. Pero lo más importante es llegar allí sintiéndose totalmente libre. Debes llegar a un lugar que no te presiona de ningún modo y te promete solamente placer y libertad. Y de hecho, eso es exactamente el estado que representa estar cerca de la Luz Superior.
En el mundo espiritual no hay presiones, problemas o responsabilidades difíciles. ¡No hay nada! Por lo tanto, la persona tiene que venir a la convención abierto a ser feliz.
Ahora mismo recibo muchas preguntas y cartas de personas que experimentan estados difíciles y tienen estrés. No están muy seguros si deben asistir a la convención o no, y si es lo mejor para ellos. Algunas personas se espantan cuando escuchan sobre la garantía mutua, pensando que no son capaces de esto. Algunas personas oyen que se trata de un lugar en donde se recibe la “Luz” y no saben qué es eso.
Las personas no entienden que hablamos sobre la unidad, que todo el mundo tiene que lograr ahora. Deseamos acelerarlo antes de que los golpes de la naturaleza caigan sobre nosotros. La unidad que intentamos conseguir nos permitirá tener la sensación de la Luz Superior, la Vida Superior. Esta unidad nos sanará de todas las aflicciones y dificultades.
Baal HaSulam escribe al final del Prefacio al Libro del Zohar que nuestra separación es la fuente del mal, del sufrimiento, las enfermedades y los infortunios. Y viceversa, cuando nos acerquemos nos purificaremos de todas las aflicciones en todos los niveles: el material y el espiritual.
Por lo tanto, vengan a la convención libre y alegremente; nadie les obliga a hacer nada. Ni siquiera tienen que llegar con una sonrisa; lo organizaremos para que suceda allí. Sólo esperen y verán.
(25304 – De la cuarta parte de la lección diaria de Cabalá del 29 de octubre 2010 – La Libertad.)
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La alegría es una señal de otorgamiento.