Esforzándonos por la conexión ideal

123Pregunta: En mi trabajo espiritual soy incapaz de conectarme con el Creador y con el grupo. ¿Qué debería hacer?

Respuesta: ¿Quién me dio este grupo? ¿Quién me trajo a esto, quién lo organizó todo? ¿Quién dirige a todas las personas que están sentadas delante de mí?

En la decena hay nueve personas a parte de mí, y todas ellas están listas para unirse conmigo. ¿Quién está dirigiéndolas, quién las elige, prepara y empuja hacia la conexión de unas con otras? ¿Qué fuerza hace todo esto sino el Creador? No hay otra fuerza, yo solo necesito revelar cómo hace Él esto, cómo guía todo por medio de los hilos, como un titiritero, y de qué manera Él nos reúne.

¿Y dónde estoy yo? ¿Quién tiene libre albedrío a nuestro alrededor, dónde se manifiesta y en qué moción interna precisa?

Entonces empiezo a pensar, a mirar a los otros y a darme cuenta de que el Creador lo hizo todo, y Él nos dio la oportunidad de incrementar el deseo por medio de la conexión mutua con el fin de revelarlo, para que del titiritero escondido, Él se convierta en uno evidente, en aquel que llenará todos los espacios vacíos entre nosotros. De pronto, con todas nuestras fuerzas, atributos e intenciones, con nuestros deseos y pensamiento, empezamos a completarnos los unos a los otros de forma que organicemos un sistema perfecto donde todos nos ajustemos de forma ideal.

Por lo tanto, aparte de la posibilidad de conectarnos perfectamente, de aspirar a la unidad, todo lo demás lo hace el Creador. Nosotros solo necesitamos mostrar movimientos hacia la conexión ideal. Y esto, también, lo hará Él, pero nosotros necesitamos tratar de permanecer en aspiración por esto.

No sabemos, no entendemos ni sentimos. Nosotros solamente queremos que esto pase, con Su ayuda.

(144727 – De la Convención en San Petersburgo «Día uno» del 9/19/14, Lección 2)

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *