Juicio justo

Dr. Michael laitmanLa Torá, «Éxodo» Mishpatim, 23:3: «No favorezcan al pobre en el pleito de él».

Con la palabra «pobre», nos referimos a un estado en el que la persona no tiene el poder para vencerlo. A «pobre» es débil y no es necesario que ustedes se fuercen en él, de lo contrario, seguirán siendo débiles. Es necesario hacer un juicio sobre el estado en que se encuentra. Todo debe ser de acuerdo a la ley, la sentencia debe construirse sin conexión con los «Partzufim».

Esto se refiere a las líneas derecha e izquierda. ¿Cuál de ellas es la más débil? El altruismo es considerado como más débil en comparación con el ego, el ego es más fuerte.

Ustedes no tienen que inclinarse hacia este lado. En primer lugar, no pueden hacer esto. En segundo lugar, no tienen que hacer esto, en tanto que no hayan elevado el lado débil a un nivel en el que llegue a ser tan importante para ustedes, que las dos líneas sean iguales, entonces pueden hacer un juicio, a pesar de todo esto.

Nuestro rol es el de elevar la «línea derecha» a un nivel significativo. Aquí no puede haber ninguna inclinación hacia ningún lado: ni a la derecha, ni a la izquierda. No es como en otras religiones y creencias.

Mientras las dos líneas no estén equilibradas, como en una balanza, ustedes no pueden emitir un juicio. Pero ¿cómo es posible hacer un juicio si éstas son iguales? ¿Cuál de ellas es la correcta? ¡Ninguna! Tómenlas a ambas y elévenlas. Sólo allí el vértice del triángulo las une, como dos opuestos que sólo pueden conectarse más arriba, en el siguiente nivel.

Esta es toda la sentencia, ¡cuando ustedes establecen de manera precisa que no hay posibilidad de desviación, las dos líneas son absolutamente iguales! Yo no veo ninguna preferencia por esta versus esa. Y así se descubre la necesidad de elevación. Y hasta entonces, son sólo palabras, no una necesidad.

En el siguiente nivel ocurre lo mismo. La mecánica de todos los niveles es idéntica.

(115443)
Del Kab.TV «Secretos del Libro Eterno » del 5/24/13

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