En las noticias (servicio de noticias Gallup): «Alrededor de un tercio de la población adulta estadounidense cree que la Biblia es de hecho la palabra de Dios y debe ser tomada literalmente palabra por palabra. Este porcentaje es ligeramente más bajo que el de hace varias décadas atrás. La mayoría de aquellos estadounidenses que no creen que la Biblia sea literalmente cierta, cree que es la palabra inspirada por Dios pero que no todo debe ser tomado literalmente. Uno de cada cinco estadounidenses cree que la Biblia es un libro antiguo de «fábulas, leyendas, historia y preceptos morales, escritos por el hombre».
Creer literalmente en la Biblia está fuertemente relacionado con indicadores religiosos, incluyendo el acudir a la Iglesia y la identificación con los protestantes u otra fe cristiana no católica. También hay una fuerte relación entre la educación y el creer en la Biblia literalmente, haciéndose esta creencia cada vez menos frecuente entre quienes tienen educación universitaria».
Mi comentario: obviamente que es necesaria una educación sistemática y a largo plazo para inculcarle a la gente una visión objetiva del mundo, para sacarlos de su nivel infantil de percibir el mundo y llevarlos al nivel donde no rechacen la Biblia, sino más bien que la comprendan sensiblemente: como la sabiduría del más alto nivel, el siguiente estado de la humanidad.
Los seres humanos fueron creados en la propiedad de «recepción» (egoísmo) y se sienten a sí mismos en esta propiedad. Llaman a sus sentimientos «este mundo». La Biblia habla sobre otra forma de percibir el mundo, en la propiedad de «otorgamiento» (altruismo) y acerca de una sensación dentro de esta propiedad llamada «el mundo futuro o superior«.
La Cabalá nos brinda la oportunidad de hacer una transición pacífica desde la percepción en la propiedad de «recibir» hacia la percepción en la propiedad de «otorgar«. De lo contrario, la transición será trágica.
Ya que terminamos nuestro desarrollo en la propiedad de «recibir» y estamos en el comienzo de la transición hacia la propiedad de «otorgar», la Cabalá se nos está revelando hoy. Sugiere que la utilicemos para aprender a qué atenernos y cómo planear el futuro.
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