La materia del Faraón en la forma del Creador

El Creador establece para nosotros una condición: «Quiero que disfruten de lo que es totalmente contrario y odioso para ustedes, de aquello que va en contra de su naturaleza. Y concretamente Quiero que obtengan placer del estado opuesto y contrario y deseen existir en él, y en consecuencia que lo prefieran por sobre todos los placeres que puedan sentir ahora en su estado actual.

Yo se los revelaré ligeramente para que sean capaces de anularse ustedes mismos gradualmente, anular su estado actual, construyendo un estado nuevo y opuesto en su lugar. Y tienen que hacerlo no por los placeres que son la base de las vidas de ustedes en este momento, sino para que puedan ascender hasta Mi altura y debido a eso que aprecien Mi grandeza».

El Creador dice: «Yo no necesito ni el respeto de ustedes ni la transformación de su naturaleza hacia el otorgamiento, y no hace ninguna diferencia si lo desean o no. Más bien, todo es a fin de habilitarlos para que sientan ambas fuerzas determinadas por Mí en la creación entre las cuales pueden existir: la fuerza de otorgamiento y la fuerza de recepción. Al preferir la primera sobre la última, adquieren las dos.

«Ustedes no destruyen nada, sino que utilizan las dos para que el amor cubra todos los pecados. Necesitan ambas fuerzas ya que no existe la una sin la otra. De hecho ustedes son los seres creados y sólo pueden tener la forma del Creador. Sin embargo, dentro de esta forma, hay una materia contraria a Mí. Y entonces pueden existir y ser iguales a Mi».

Por lo tanto, todo nuestro trabajo está dirigido a la adquisición de estos dos elementos: la materia del Faraón y la forma del Creador. Esto es así porque toda nuestra percepción de la realidad, el despertar del mundo, constan de materia y forma sobre las cuales se basa nuestra educación. Nosotros nos constituimos partiendo de ambos elementos: de las líneas derecha e izquierda.

La línea izquierda es la materia, y la línea derecha es Su forma. Cuando combinamos la materia y la forma, construimos la línea media, una imagen del hombre.

(68976 – De la 1º parte de la lección diaria de Cabalá del 2/6/2012, Escritos de Rabash)

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