Y Dios se reveló a Avraam en Aloney Mamra. Se sentó en la entrada de su tienda y el día estaba sofocante de calor. Levantó la mirada y vio a tres hombres y él les preparó algo de comer y ellos comieron. Y uno de ellos dijo, “Volveré contigo en un año exactamente y tu esposa Sara tendrá un hijo.” Y Sara se rió para sus adentros. Abraham fue para mostrarles la salida. Y Dios dijo: “Grande es el pecado de Sodoma y Gomorra.” Y Avraam dijo: “¿Vas a destruir a los justos igual que a los perversos? ¿Tal vez puedes perdonarlos en razón de los cincuenta justos que hay?” Y Dios dijo:”Si encuentro cincuenta justos dentro de la ciudad, entonces perdonaré a la ciudad en razón de ellos.” Y Avraam dijo: “Tal vez habrá cuarenta allí. Y Él dijo: “Los perdonaré por estos cuarenta también.” “¿Y, si solo hubiera diez. “No los destruiré en razón de estos diez. Y Dios partió y Avraam regresó a su tienda. Y dos ángeles se fueron a Sodoma y Lot los vio y les dijo, “Señores, pasen la noche aquí.” Aún no se acostaban, cuando las personas de Sodoma rodearon la casa y dijeron, “¿En dónde están las personas que llegaron a tu casa esta noche?” Y Lot salió a la puerta de entrada y dijo, “¡No hagan maldad, hermanos míos!” Pero ellos empezaron a derribar la puerta. Y las personas jalaron a Lot dentro de la casa y cerraron la puerta. E hicieron que las personas que estaban a la puerta quedaran ciegas. Y estas personas le dijeron a Lot: Saca todas tus posesiones de la ciudad, pues destruiremos este lugar.” Pero él dudaba y los ángeles lo tomaron de la mano y lo sacaron de la ciudad. Y le dijeron: “¡Sálvate y no mires atrás!” Y Dios derramó sulfuro y fuego desde los cielos sobre Sodoma y Gomorra. Pero su esposa miró atrás y se convirtió en una columna de sal. Y Lot se estableció en una cueva en las montañas junto a sus dos hijas. Y la hija mayor le dijo a la más joven, “Vamos a emborrachar a nuestro padre con vino y nos acostaremos con él y tendremos posteridad de nuestro padre. “Y concibieron de su padre. Y la mayor parió a un hijo y le puso por nombre Moab. Y la joven parió a Amon. Y Avraam se mudó al sur del país y de Sara dijo, “Ella es mi hermana.” Y Avimelech tomó a Sara. Y Dios vino hasta Avimelech en un sueño y le dijo. “Te estás muriendo por una mujer porque es casada.” Y Avimelech mandó llamar a Avraam, “¿Qué me has hecho?” Y Avraam dijo, “Es porque pensé que aquí no existe el temor a Dios y me iban a asesinar por mi esposa. Pero ella es realmente mi hermana – por mi padre, no por mi madre y se convirtió en mi esposa.” Avimelech le dio a Avraam, ovejas, ganado, sirvientes y le regresó a Sara. Y Sara concibió y parió un hijo a Avraam. Y Avraam llamo a su hijo Yitzhak. Y circuncidó a su hijo en el octavo día, como Dios le ordenó. Y Avraam tenía cien años de edad. Y Sara vio que el hijo de Agar, la egipcia, que parió un hijo a Avraam estaba lleno de desprecio y le dijo a Avraam: “Manda lejos a la sirvienta y a su hijo.” Y le pareció triste a Avraam. Pero Dios le dijo a Avraam: “Escucha todo lo que Sara te diga, pues tu descendencia será llamada por Yitzhak. Pero también te daré una nación del hijo de tu sirvienta.” Y por la mañana, Avraam los envió lejos y el joven creció y se estableció en el desierto con su madre y tomó una esposa de la tierra de Egipto. Y Dios decidió probar a Avraam y dijo, “¡Avraam! Toma a tu primogénito Yitzhak y ve a la tierra de Moriah y sacrifícalo como una ofrenda en el altar en una de las montañas que yo te diré.” Y Avraam se levantó y se dirigió a ese lugar. Y construyó un altar, ató a Yitzhak y lo colocó en el altar. Y tomó un cuchillo para matar a su hijo. Pero un ángel de Dios de los cielos dijo: “¡Avraam! No levantes la mano a tu hijo, pues ahora ya sé que tienes temor de Dios.” Y el ángel dijo, “¡Por lo que has hecho, multiplicaré tus descendencia, vencerán a sus enemigos y por medio de ellos las naciones de la tierra serán bendecidas, porque Me has escuchado!”