Los niveles de alcance del Creador

Pregunta: ¿Cómo se expresa la unidad de la vasija del alma general?

Respuesta: La vasija misma es la unidad. Una vasija no se compone de siete mil millones de partes, sino de la conexión entre ellas. La conexión entre todos los otros y yo somos mi vasija espiritual.

Al establecer una relación contigo, yo restrinjo mi ego y comienzo a tratarte en otorgamiento y amor y descubro al Creador en nuestra relación y así le traigo contento a Él. Sé que le traigo contento a Él al tratarte bien. Se dice, «del amor de los seres creados al amor del Creador».

Entonces yo tengo que elegirte y comenzar a amarte aun cuando no lo quiera. Pensaba que no tenías nada que ver conmigo, pero lo hago sólo por la meta, la cual elevas tan alto que me da suficiente poder para arreglar mis relaciones contigo.

Cuando comienzo a restringir mi ego y te trato con amor, cuando lo hago con el fin de llevar contento al Creador, el Creador, la fuerza superior, se revela en nuestra relación. Pero mientras tanto, Él es revelado en el nivel de la naturaleza inanimada, Nefesh. Yo comienzo a sentir Su presencia, que por ahora es pasiva. Después de todo, el grado en el que lo descubro a Él depende de mí.

Después desarrollo mi actitud hacia ti con el fin de  llevar incluso más contento al Creador y descubrir en nuestra relación la Luz del próximo nivel, en el nivel vegetativo, Ruaj, comienzo a sentir que tú, el Creador y yo, estamos cambiando y avanzando en nuestra relación. Existe una especie de vitalidad en ello, apoyo y mutualismo que me llenan de vida.

Existe alguien con el cual puedo cooperar en mutualidad; no estoy ante un muro. Entonces continúo desarrollando mi relación contigo con el fin de llevar contento al Creador en el nivel de Ruaj, para aprender esto como una flor que vive y muere, que responde a la luz del sol, al día y a la noche. Yo descubro que puedo revivir este amor y sentir qué lo debilita y lo deteriora.

Así desarrollo mi sensibilidad y me elevo al siguiente nivel, al nivel del animado. Esto significa que ya soy independiente hasta cierto punto. No sólo respondo a diferentes condiciones, también puedo moverme de un lugar a otro y dar a luz a una nueva vida. Comienzo a sentir cada vez más profundamente el deseo de recibir que he descubierto antes, y veo que puedo continuar trabajando con este, cambiarlo y generar nuevas acciones y ser independiente como debe ser el nivel animado. Comienzo a sentir al Creador como la Luz de vida.

Después construyo la relación hasta el nivel del hablante y alcanzo el auto manejo del Creador. Es justo como en nuestro mundo cuando un niño crece y llega a la edad suficiente para no estar bajo la supervisión de sus padres. De la misma manera, mientras más hago eso, más me parezco al Creador y me fusiono con Él. Esto se debe a que comienzo a realizar Su parte y mediante eso, me vuelvo totalmente independiente. El Creador no me controla; yo llevo a cabo esta función por mí mismo.

Todo depende de cuánto trabajemos con nuestro deseo de recibir. Sólo en este descubrimos toda la realidad, al  penetrar más profundo en ella y discernir cada vez más detalles ahí. Así, descubrirás repentinamente el mundo espiritual en este mundo. Estuvo aquí todo el tiempo, pero simplemente carecías de la sensibilidad para verlo. Tu detector no tenía la suficiente determinación, no tenía el rango de frecuencia deseado para percibir el mundo espiritual.
(83515)
De la 3º parte de la lección diaria de Cabalá del 7/9/12, El Estudio de las Diez Sefirot

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