No hay santidad en nuestro mundo

34_100_wp[1]Pregunta: ¿Por qué debemos entender cada palabra de El Libro del Zóhar en su sentido espiritual y no en su simple sentido corporal?

Respuesta: De ninguna manera debemos interpretar las palabras de El Libro del Zóhar en su sentido corporal, porque de esta manera el hombre disminuye la Torá al nivel de este mundo. Debemos ascender desde las ramas hasta los raíces, desde este mundo  hacia arriba, al mundo espiritual. Y tú  preguntas: ¿por qué no rebajamos el mundo espiritual  a nuestro mundo?

Primero, en nuestro mundo no hay las mismas leyes que en el mundo espiritual. Toda la confusión de nuestra realidad viene del hecho que la gente imagina el mundo espiritual sin existir en él, y después, por la fuerza visten lo espiritual  en  lo material, como si tuvieran la fuerza del otorgamiento en la mano derecha y la fuerza de la recepción en la mano izquierda, o como si algunas partes de su cuerpo fuesen más santas que las otras, etc. Todo esto es falso. Para nosotros está prohibido conectar lo espiritual con lo que entendemos, sentimos y hacemos en nuestro mundo. Entre ellos no debe existir ninguna conexión.

No hay nada sagrado en nuestro mundo, incluyendo los niveles inanimado, vegetativo, animado y humano. No hay ninguna santidad en nada de lo que hacen los seres humanos en este mundo. El Libro del Zohar se denomina el libro sagrado, porque con su ayuda puedo ascender de nuestro  mundo, del egoísmo, hacia la santidad, el otorgamiento y el amor al prójimo.

Yo soy un punto en el corazón que pertenece al mundo espiritual, al mundo de la santidad. Este es el único punto en mí que es distinto de toda mi naturaleza y con la ayuda de este medio, “el libro sagrado”, puedo ascender al mundo de la santidad, al otorgamiento. Sin embargo, no es el papel ni su tipografía que son sagrados. Tampoco las letras en el libro son sagradas. La santidad es la conexión entre la Luz y la vasija (Kli) que simbolizan las letras. Pero, en nuestro mundo no hay nada sagrado.

El problema es que la gente empieza a atribuir santidad a una persona o a sus acciones. No obstante, todo esto no son sino meros símbolos. Todos los atributos para cumplir los preceptos: el Talit, el Tefiiín, el libro de la Torá, el Arón Kodesh (el armario donde se guarda el pergamino de la Tora) son simplemente los símbolos de la interacción de las Luces y los Kelim, las relaciones entre ellas, los estados de las almas. Por lo tanto, los estados de las almas son precisamente lo que es sagrado, porque tienen el atributo de otorgamiento.

 El libro de la Tora que está en el “Aron Kodesh” es simplemente un símbolo de  la esencia espiritual que se denomina Zeir Anpin y que afecta el deseo, Maljut, (la unión de todas las almas)con la luz de la santidad, volviéndolo otorgante. De esta forma corrige nuestras almas y nos eleva.

Además de los símbolos no hay nada en nuestro mundo.  Todos nosotros  “somos similares a los animales mortales”. Y la persona que subdivide los objetos y las acciones de este mundo en más o menos sagrados, solamente desvía del camino de la corrección.

Todo esto son acciones “Erev Rav”, porque impiden el avance al mundo espiritual y la corrección del alma.

(Extracto de la lección sobre, El Libro del Zohar correspondiente al 28 de diciembre 2009.)

Material Relacionado:

De la lección del Zohar, 28/12/2009

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