Un enemigo es cualquier deseo mío que no esté dirigido a la realización de mi personalidad.
Comentario:
Pero siempre hay algún tipo de enemigo personalizado.
Mi respuesta:
No, solo nos parece que el enemigo es externo, pero en realidad todo está dentro de nosotros. Nosotros producimos nuestros enemigos externos, estos «muñecos» que nos estorban desde dentro con nuestras faltas personales.
Todos estos «muñecos» no tienen libre albedrío, debo atenerme al hecho de que todos ellos son mis fuerzas interiores que se proyectan en mi imaginación fuera de mí.
Si nos corrigieran, veríamos el mundo de la misma manera.