“¿Qué piensa usted sobre la renuncia silenciosa?” (Quora)

Entérate de la respuesta a este y más cuestionamientos planteados en la sección de Preguntas y respuestas al Dr Michael Laitman en Quora

 

¿Debe uno intentar fortalecer o eliminar el propio ego?

Primero, tenemos que entender lo que es nuestro ego, es decir, nuestro deseo innato de disfrutar a expensas de los demás y de la naturaleza. Dado que se nos dió por naturaleza, no lo debemos eliminar, sino más bien, tenemos que invertirlo para que en vez de destruir nuestras relaciones, al querer estar cada uno por arriba del otro, aprendemos a cambio, cómo disfrutar de servir a los demás.

Nuestro ego, de forma natural nos hace que queramos eliminar a los demás, colocarlos de forma que derive en nuestro propio beneficio, a costa suya y que los controlemos. Así, podemos también hacer lo opuesto, utilizar esta palanca para servirles y satisfacerlos.

La naturaleza nos da un ejemplo clave, sobre cómo se puede disfrutar al servir a los demás: la madre hacia sus hijos. Una madre está dispuesta a trabajar todo el día para servir a sus hijos, con tal de verlos crecer felices. Sin embargo, si no compartimos relaciones familiares, entonces no tenemos esa forma de relación para con los demás. No estamos conectados así a los demás, por lo que los demás destacan en nuestros propios cálculos de costo-beneficio.

Entonces, necesitamos llegar a un estado en el que sintamos que la humanidad es nuestra familia. Entonces, tenemos que relacionarnos con los demás, de forma semejante a cómo nos relacionamos hacia nuestras familias. De esta forma, gradualmente podremos acercarnos al entendimiento de por qué la naturaleza creó en nosotros un ego y cómo debemos trabajar en nosotros mismos con el fin de invertirlo, de una forma negativa, a una positiva.

Pudiera parecer descabellado, porque la mayoría de las personas no pueden ni siquiera lidiar con el peso de sus propios problemas en su vida personal y familiar, así que ¿Cómo esperamos lidiar con los problemas de todo el mundo? Sin embargo, al momento que empezamos a relacionarnos con la humanidad como con una familia, de pronto sentimos que adquirimos una nueva fuerza que nos llena de comprensión y con la sensación de cómo conducirnos de forma que nos llevemos perfectamente. Es como si nuestro intelecto y nuestra emoción, de pronto trabajase formas que están libres de error.

Tal inversión en conciencia, toma lugar porque invertimos la fuerza que divide “lo mío” de “los demás” y luego, todo el mundo y todas las cosas parecen pertenecer a uno mismo, como un único sistema. Además, ganamos una clara percepción y sensación de la fuerza superior de la naturaleza que maneja el sistema, una forma de amor, otorgamiento y conexión y que nos equilibra con la trayectoria de esa única fuerza.

¿Qué piensa usted sobre la renuncia silenciosa?

Creo que los empleados están en lo correcto, exigiendo hacer exactamente lo que establecen sus contratos, en otras palabras, que nuestro lugar de trabajo compre cierta cantidad de nuestro tiempo y que nosotros seamos devotos a nuestro empleo en ese tiempo; y que también nuestros empleadores no tomen más allá de ese tiempo.

En algunos lugares, las personas dan todo en su lugar de trabajo; y en otros lugares, dicen “No, no somos esclavos». “Queremos trabajar por una cierta cantidad de horas y obtener cierto pago por ello y es todo.” Quieren sentir que viven su propia vida y es una demanda legítima.

En general, veo la renuncia silenciosa, como un desarrollo positivo. Cada quien necesita pensar sobre el significado y propósito de la propia vida y con quién vive. Estos son asuntos importantes para las personas.

¿Realmente puede curarnos la naturaleza?

Hay un enfoque terapéutico en Japón llamado «baño de bosque», que envía a personas con diversas afecciones médicas a una larga estancia en la naturaleza. Las investigaciones demuestran que una larga estancia en la naturaleza puede disminuir la presión arterial, las hormonas del estrés, tratar la ansiedad, la depresión y en general, ayudar a curarse de diferentes afecciones médicas.

Efectivamente, la naturaleza tiene poderes curativos. Cualquiera puede sentir que un paseo por la naturaleza, estar ahí y vivir en el campo por unos días, tiene efecto curativo.

La naturaleza está formada por lo inanimado, lo vegetal y lo animal y necesitamos conectarnos con esos niveles, en contraposición a la jungla de piedra y ladrillos en la que vivimos, con estrés y edificios altos.

Pero, el ego humano que desea explotar a los demás y a la naturaleza, en beneficio propio, nos aleja cada vez más de la naturaleza, nos hace destruirla y distanciarnos de ella, ese proceso acabará por hacernos ver lo equivocados que estamos al hacerlo.

Creo que en el futuro todo se solucionará. Comprenderemos que el ego nos está matando a cada momento y que tenemos que revisar la forma en la que vivimos entenderemos lo que nos pasará si seguimos por la misma trayectoria. Y ya no permitiremos que el ego nos obligue a hacernos daño.

Aunque, no es necesario que nos vayamos a vivir al bosque. La solución está entre nosotros, que empecemos a vivir en unidad, con amor y apoyo mutuo. Este enfoque nos curaría de todas nuestras enfermedades. Podríamos hacer una lista de mil páginas de enfermedades, pero si logramos conexiones de unidad y amor, nos curaríamos de todo. Las relaciones de amor y apoyo mutuo nos equilibrarán con la naturaleza a nivel humano, su nivel más alto.

¿Qué te causa la desesperación?

Lo que nos da la naturaleza es en nuestro beneficio. Si vivimos en estado de desesperación, quiere decir que la próxima vez es mejor esforzarnos en esa dirección, porque no tendremos lo que queremos. Por eso, la desesperación viene a enseñarnos que no debemos malgastar nuestro tiempo y energía en una determinada dirección.

La desesperación es un punto crítico de escrutinio en el que podemos revisar la dirección en nuestra vida. Podemos ver que esa dirección no es para nosotros y podremos dejarla pasar, tomar otra dirección, sin arrepentirnos y tal vez lleguemos a otro punto de desesperación y entendamos que, efectivamente queremos ir en la dirección en la que íbamos y cambiemos a una marcha superior en esa dirección, con nuevas fuerzas.

La desesperación nos muestra que tenemos determinada meta y determinadas fuerzas, pero vemos que no coinciden. Por eso, tal vez al desesperarnos de nuestras fuerzas, podemos descubrir nuevas fuentes de energía para alcanzar nuestro objetivo, por ejemplo, alguien a quien consultar, un grupo con el que conectarnos, un entrenador o un coach para de ahí, recibir fuerza adicional. En una situación así, la desesperación se une al sentimiento de alegría, porque podría ser que sin desesperación, trabajemos en una dirección y nos conformemos con la mediocridad.

¿Qué es calma?

Calma es un estado en el que nos sentimos cómodos, es un estado diferente para cada uno. Por ejemplo, algunas personas son desordenadas y si tratas de calmarlas, pueden explotar por la presión. Es decir, el desorden es su calma.

Hay diferente tipo de gente: colérica, sanguínea y otros que, naturalmente viven en estrés o bajo presión. Así, la calma es en relación con cada individuo. Que cada uno esté cómodo en su estado, es estar tranquilo. Y debemos entender que algunos necesitan altos niveles de actividad para sentirse tranquilos.

Tuve un amigo que dirigía un teatro. Tenía que lidiar con frustración y presión las 24 horas del día, pero cuando había periodos en los que no había espectáculo, se sentía deprimido. Así, la definición de calma es totalmente personal. Tampoco podemos ver su definición por la presión sanguínea ni por otras medidas físicas. Simplemente, cada uno siente calma de forma diferente. En resumen, cuando una persona se siente satisfecha con su vida, está tranquila.

Una paradoja clave con respecto a la calma es que, generalmente consideramos que la calma es un estado más saludable que el estrés, pero la vida no nos permite estar en calma. Sucede porque moldeamos nuestra vida de forma artificial, a partir del ego. Queremos usar a los demás y a la naturaleza en beneficio personal y al hacerlo, estropeamos la vida de los demás y nosotros logramos cualquier cosa, menos calma. Por lo tanto, para lograr calma en la sociedad actual, necesitamos corregir el ego humano.

Basado en «¿Qué piensa usted sobre la renuncia silenciosa?» con el cabalista,  Dr. Michael Laitman. Escrito/editado por estudiantes del cabalista, Dr. Michael Laitman.

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