Un hombre y una mujer como rasgos de la naturaleza

Pregunta: Mis padres se divorciaron y eso dejó su huella en mí. Yo sé que hay mucha gente de mi generación que han sido afectados por esto. Nosotros les tememos a las mujeres. Es muy difícil confiar en ellas.

Respuesta: Yo no entiendo tus problemas, porque nosotros hablamos de cosas absolutamente diferentes. No hablamos de hombres y mujeres como organismos biológicos, como un conjunto de cromosomas, genes y hormonas.

Hablamos de hombres y mujeres como rasgos de la naturaleza (¡y esto es muy importante para nosotros!), donde entendemos como adultos, cómo usar nuestras fortalezas y debilidades de manera adecuada para alcanzar una meta común. Las personas serias que están aquí reunidas, quieren alcanzar eso y no se preocupan por los problemas cotidianos entre hombres y mujeres en nuestra vida normal. Nosotros nos alejamos de la vida material y nos elevamos por encima de ella. Queremos utilizar nuestras cualidades espirituales, ya sean masculinas o femeninas, para apoyarnos mutuamente y elevarnos. Tenemos que ir juntos hacia la meta, con el fin de alcanzarla.

Cada uno de nosotros tiene su propia misión, su propio rol, pero no puede hacerse sin contar con los demás. Sólo nuestra combinación mutua hace que nuestra conexión sea productiva.

Nos aprendemos sobre el Aviut (deseo) y Zakut (pantalla). Es necesario tenerlos a ambos como complementarios e iguales entre ellos. Uno no puede existir sin el otro. ¿Si una pantalla fuera más grande que el Aviut, habría aparecido desde el principio? La pantalla no puede ser diferente debido a que sólo aparece en la parte superior de un deseo. Si el deseo es más grande que la pantalla, significa que ya no está dirigido hacia el otorgamiento, sino hacia la recepción. Por lo tanto, es importante contar con una adecuada combinación de cualidades masculinas y femeninas.

Me gustaría enfatizar que nosotros hablamos de cualidades, no de hormonas u otras características materiales. Bajo el concepto de «mujer» se entiende una aspiración hacia la espiritual, y como «hombre» se entiende la realización de esta aspiración que no se aplica a este mundo en absoluto.

(75499 – De la Convención en Vilna del 3/23/12, Lección 2)

Siete mil millones de universos incluidos
La geografia espiritual
La pantalla es un calculo para el trabajo con el deseo

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