Año 2021- El fin de la era de la esclavitud

Cuando la economía finalmente comenzó a abrirse tras un año de cuarentena, surgió un nuevo fenómeno: Las empresas no pueden reclutar el número necesario de trabajadores para reanudar la producción, a pesar de los altos índices de desempleo. Se pensaba que aquellos que perdieron el empleo debido a la pandemia del coronavirus, se apresurarían a tomar cualquier oportunidad de empleo y no habría problemas con los empleados. 

Pero, hay una enorme escasez de trabajo, tanto en Israel como en el mundo. Y esto se aplica no sólo a empleos con sueldos bajos, no especializados, sino también en alta tecnología, abogacía, contaduría. Por esta razón, las oficinas tienen que trabajar con personal reducido y con horario reducido. 

Y la gente que antes tenía esos empleos, está en casa, recibiendo pensiones del estado en relación a la pandemia y no tiene prisa por regresar al trabajo ¿cómo podemos explicar esta paradoja, que con una enorme tasa de desempleo, es imposible encontrar trabajadores? 

No hay gente suficiente que quiera trabajar. Muchos perdieron el deseo. Finalmente, no tienen peligro de morir de hambre ni bajo presión social. Cuando recibes beneficios del gobierno, puedes recostarte en el sofá, leer un diario o libro, ver TV, o ir a la playa con tu  familia. 

Y en realidad, no hay nada malo, porque se dice que algunas veces “es preferible sentarse y no hacer nada”. El mundo no está construido para sobre- esforzarte en el trabajo. Hay muchos trabajos que no hacen ningún bien, ¿no sería mejor quedarse en casa? Al menos, el medio ambiente mejorará y la contaminación disminuirá. 

No hay nada inesperado, porque qué es el hombre, el deseo de disfrutar, que se adapta a las condiciones que lo presionan. Si no hay presión, no se moverá. 

Previamente, la sociedad adoptó la actitud de que es imposible no trabajar: si no hay trabajo -no hay medios de subsistencia. Por eso, la gente aspiraba a obtener una buena profesión para asegurar su subsistencia y alimentar a su familia. Hoy, todo se está derrumbando: nadie quiere tener familia, no hay necesidad de trabajar. 

Y en realidad, la meta no es trabajar más y más y enriquecer al amo, sino entender para qué existimos ¿De qué sirve trabajar como economista, de mañana a noche quebrarse la cabeza para retorcer el negocio y que el dueño evada el pago de impuestos y gane unos cuantos millones? ¿y de qué sirve el progreso tecnológico, que nos permite producir más y más juguetes para que juguemos?¨

Será más útil si dedican este tiempo a la familia, hijos y realmente se desarrollan estudiando ciencia, filosofía, Cabalá, es decir, desarrollo espiritual. No estudiar el mundo artificial que construimos, sino el mundo natural, a la naturaleza en la que vive. Y así todo se calmará, no habrá presión ni problemas ni divorcios. 

De otra manera, nosotros mismos sostenemos los sistemas que nos encadenan. 

Si la gente se queda en casa, tendrá tiempo y energía para pensar en el mundo y en la vida, en su familia, su nación y el mundo entero para mejorar ¿qué resultados útiles nos ha dado el desarrollo de la tecnología en los pasados cien años, sólo nos han llevado a la exprimidora? 

La pandemia tranquilizó a la humanidad. La gente no quiere trabajar, no quiere volver al trabajo ni ser esclava de un puñado de capitalistas que tienen millones de dólares de ganancias. Para existir en el mundo, no hay que trabajar diez horas al día y pasar dos horas en embotellamientos. 

Finalmente, nos dimos cuenta de que no tenemos que trabajar como esclavos del faraón ni llenar los bolsillos de alguien más. ¡La era de la esclavitud terminó! Pensemos en qué hacer con nuestra vida. Gracias a las tecnologías modernas, que logramos con nuestro trabajo duro, es suficiente con un par de horas al día para tener todo lo que necesitas para vivir. 

¿Para qué trabajamos el resto del tiempo? Para acumular miles de millones en algunas cuentas. Veamos cómo convertir todas nuestras posibilidades modernas para organizarnos una vida en armonía. Cuánto necesitas trabajar: un par de horas al día y no todos, en su mayor parte los hombres. 

Veamos cuántos abogados, economistas, etc. realmente necesitamos en una sociedad corregida, reformada. Aparentemente, mucho menos que ahora. Pero necesitaremos muchos más maestros, educadores y más mujeres trabajando con niños. Necesitamos invertir más dinero, en cuidar a los enfermos, los ancianos y en restaurar el orden en nuestro hogar. 

No estamos de acuerdo en regresar a la esclavitud. Estamos dispuestos a trabajar sólo lo necesario en cada posición, en cada empresa, si es realmente en beneficio de la humanidad y no sólo por ganancias. Persiguiendo ganancias, exprimimos a la naturaleza y a nosotros mismos y llegamos a una crisis total. 

Revisemos el orden una vez más y vamos a establecerlo de acuerdo a necesidades, en el beneficio del entorno, del hombre, de la familia. Necesitamos un programa de gobierno para formar a la gente, cursos de capacitación para madres y padres, para construir familias apropiadas, corregidas y todos los sistemas de sostén de manera que todos estén bien y no unos a expensas de otros. 

Ya hemos invertimos lo suficiente en el desarrollo de la tecnología, enfoquémonos ahora en cultura, arte, educación, cosas que internamente den satisfacción a la gente, no sólo alimento y vestido. 

El proceso por el que pasamos, de acuerdo al programa de la naturaleza, es irreversible. Inevitablemente nos alejaremos del trabajo duro que hemos hecho en los pasados cien años. Destruimos el entorno y a los seres humanos, sus oportunidades de desarrollo y ahora, necesitamos reconocerlo. La humanidad está preparada, en cualquier parte del mundo, las terribles consecuencias de la carreras tecnológica e industrial son manifiestas. Es tiempo de detenerla, hacer un cálculo serio y arreglar lo que sea posible arreglar. 

No hay otro camino para la humanidad. Necesitamos entender por qué la naturaleza nos trata así, lo que necesitamos hacer, cómo comportarnos, a qué nuevo mundo necesitamos entrar y qué nuevos sistemas necesitamos construir.
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De Kabtv “Conversación con los escritores” 25/may/21 

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