Desarrollo gradual

Dr. Michael LaitmanLos cabalistas que alcanzaron una comprensión interna del mundo, describieron la creación entera como multidimensional, compuesta por muchos «mundos»: básicamente de esto es de lo que están empezando a hablar hoy tanto los físicos como los psicólogos.

El mundo «multidimensional» está compuesto de círculos concéntricos, los cuales investigamos desde dentro de nuestro pequeño mundo que se encuentra en el centro del punto central de estos.

El gran cabalista, el ARI, escribe que después de que todo se contrajo, fue trazado un rayo de luz y se crearon todos los mundos hasta nuestro mundo, que es el último de todos y se encuentran dentro del enorme espacio vacío. Y sólo un estrecho canal de Luz pasa desde el mundo del Infinito (símbolo ∞) a nuestro mundo.

Laitman

Nosotros comenzamos a desarrollarnos desde su punto más central, en cuyo interior, de acuerdo a la astronomía, a través del poder de una explosión, fue creada toda la materia. De acuerdo a la sabiduría de la Cabalá, la materia fue creada como resultado de una contracción incluso anterior a la explosión.

Nuestro mundo es absolutamente opuesto a todo lo que existe por fuera de él. Y por lo tanto no sentimos todo lo que existe por fuera de él. Junto con esto, nosotros sentimos sólo lo que entra a través de nuestros cinco sentidos, y a partir de esto nos describimos para nosotros mismos la imagen del mundo. Esto es lo que tenemos.

Toda la creación se formó a través de una contracción constante de arriba hacia abajo. Es decir, todos los círculos se contrajeron gradualmente hasta que el área de contracción se rompió en una multitud de partes bajo la influencia de la Luz. Y por lo tanto, dentro de la materia (del deseo de recibir), aparecieron las características de la Luz, excepto en la forma opuesta.

Si la característica de la Luz es otorgar, llenar, amar, conectar, enriquecer y crear, es decir, crearlo todo para que sea beneficioso, bueno y eterno, entonces cuando entra y rompe la materia, ésta la divide en un gran número de partes, y en sí misma produce en este lugar las características opuestas a las de ella, las características de recepción, egoísmo, coerción, odio y rechazo, las cuales están dentro de nuestras emociones negativas, aunque las usamos debido a que se han convertido en nuestra naturaleza, y así es como somos.

Todo lo que nos separa (el llamado «Faraón«) son las características negativas de la Luz, su opuesto. Y a partir de ellas nosotros podemos aprender, podemos explicarlas de forma inversa todo el tiempo y ver lo que está sucediendo.

Por lo tanto, nuestro trabajo se realiza con «fe por encima de la razón», es decir con otorgamiento por encima de le recepción, con el anhelo de unión, conexión, y amor, por encima de nosotros mismos, por sobre nuestra naturaleza. De esta manera es posible seguir adelante.

Pero nosotros mismos sólo podemos hacer pequeños esfuerzos, además, aquellos que están listos para esto son sólo personas que tienen un «punto en el corazón«, el comienzo de la característica de otorgamiento.

En principio, existe esa chispa en todos; ésta sólo se descubre gradualmente, comenzando por las personas que son más sutiles y después en aquellas que son más toscas. Al mismo tiempo, cuanto más tosca sea la persona, mayor es su potencial. A pesar de que es más difícil que ella se corrija a sí misma, consecuentemente, la intensidad del descubrimiento de su altura espiritual también será mayor. Por lo tanto, aquellos que se corrijan después de nosotros añadirán una inmensa Luz a nuestra percepción.

Digamos que, en suma, nosotros alcanzamos el nivel de Nefesh, y después de eso, cuando este pasa a ellos, ellos alcanzan los niveles de Ruaj, Neshama, Jaya, y Yejida. Cada generación alcanza un cierto nivel particular y la siguiente generación que la reemplaza, alcanza alturas aún mayores. Y nosotros nos desarrollamos de manera idéntica.

Nuestro desarrollo es gradual. Aquellos en quienes se despierta el punto en el corazón se inclinan por la búsqueda del sentido de la vida. Ellos no están influenciados por ninguna religión, lo que les interesa es el alcance, es decir, un llenado real de conocimiento, emoción, y capacidad para «coger» al mundo entero, para descubrirlo plenamente, para sentirlo dentro de ellos, y para que ellas puedan sentirse dentro de él de manera real, tangible. El punto en el corazón los empuja hacia esto.

Sin embargo, solo el punto en el corazón no es suficiente para esto, más bien se requiere de la ayuda mutua del resto de las partes rotas de los deseos colectivos, o al menos de una parte de ellos. Esta es la forma en la que se reúne el grupo.

Es más, no somos nosotros quienes reúnen el grupo. Éste se crea como si fuera por casualidad. La idea es que a nuestro alrededor existe una Luz más elevada que llena el vacío que se formó (llamamos a esto un vacío, porque en realidad no sentimos la Luz), y ésta actúa sobre nosotros según el grado de inclinación de nuestro anhelo por su característica.

(112702)
De la Convención en St. Petersburgo «día dos» del 7/13/13, Lección 3

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *