La justicia social es posible sólo como una gran familia

En todo el mundo hay llamados a la justicia social. Nosotros, por nuestra parte, deberíamos explicar a las personas que es imposible imponer la justicia social artificialmente. Una división estándar de recursos, como lo hacen en la seguridad social, no nos ayudará. Por ejemplo, es imposible comparar a un millonario que recibe mil dólares para su tercer hijo, con una familia pobre que recibe mil dólares para su tercer hijo. ¿Esto es justicia?

Como lo explica Baal HaSulam, la medida de la verdad no nos permite alcanzar la justicia. Si divides las cosas de forma igualitaria entre todos, no habrá igualdad. Entonces ¿Cómo podemos resolver este problema?

Para hacerlo, necesitamos ser como una familia. En la familia no hay igualdad, sino que cada uno recibe su parte ya que nosotros tratamos a cada uno con amor. Cuando yo amo a todos, yo puedo ayudar a uno a expensas del otro. Así yo opero de acuerdo al principio de garantía mutua, y entonces opero justamente. Simplemente no hay otro camino.

Gradualmente debemos convencer de esto a las personas. Después de todo, hoy en día la sociedad es más sensible que nunca a la desigualdad, incluyendo sectores que no hace mucho estuvieron lejos de aquello. En cada país hay muchas razones para la insatisfacción, y la única forma de tener éxito es educando a las personas en la unidad. De acuerdo al nivel de conexión, las personas llegarán a acuerdos sociales sobre cómo dividir los recursos, gracias a su simpatía con respecto al sufrimiento de los demás.

¿Puedes pedir para ti vivienda barata cuando otros no tienen nada que comer? Después de todo, tenemos un «pastel» común, que no es suficiente para suplir todos los pedidos. Entonces si no unimos a las personas en una familia, no alcanzaremos nada.

Entonces más tarde seremos capaces de explicar que el mal actual es en realidad para algo mejor: Este nos capacita para corregirnos y avanzar hacia el bien. Después de todo, gracias a la cooperación mutua cambiaremos y empezaremos a compartir los recursos de la misma manera en la que se hace en la familia. Entonces no necesitaremos ir al gobierno, el cual de todas maneras no nos ayudará con migajas imaginarias. Solamente hay una solución: la unidad de las personas.

(66713 – De la 3º parte de la lección diaria de Cabalá del 1/17/12, «El Estudio de las Diez Sefirot»)

Material relacionado:

Debemos crecer hasta llegar a la justicia social

Los indignados de Londres: manifestantes que conducen un tanque quieren llevar a juicio “al 1%”

¡Yo quiero justicia social!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *