Las muñecas huecas de encajar que contienen un secreto

Dr. Michael LaitmanPregunta: ¿Cuál es el típico temor al Creador y cómo podemos alcanzarlo?

Respuesta: El temor es lo principal. En estos momentos nosotros no tenemos nada además de este. Incluso el amor que sentiremos más adelante está basado en el temor en ese momento. Puede ser temor por mi vida, temor a desperdiciar mi vida sin propósito, sin sentido, y a acabar con ella sin ningún resultado positivo. Este temor lleva a las personas a la sabiduría de la Cabalá, y es llamado «temor a este mundo y temor al próximo mundo».

El temor proviene del hecho de que empezamos a pensar en lo que es externo a nosotros mismos y no en nosotros mismos, y podemos establecer el temor sólo con el entorno adecuado. Porque de otra manera yo podría confundirme y no entender si me preocupa cómo deleitar al Creador y si estoy avanzando hacia Él o no. Pero esto ya es el temor con respecto a la acción, cuyo resultado es externo a mí: no con respecto a mi bolsillo, a mi alma o a mi espíritu, no a este mundo o al próximo mundo, sino más bien a un lugar externo a mí, es decir que éste ya está conectado con el acto de otorgamiento.

En ese caso, yo no puedo estar seguro de que mi apreciación sea correcta, y de esta manera yo no existo en este mundo como una persona, sino como rodeado por una ilusión tal que me da la sensación de que hay muchas otras criaturas: la naturaleza inanimada, vegetativa, animada y las personas. Yo tengo que aceptarlos a todos ellos como partes de mi alma. A menos que alcance el temor a preocuparme más por ellas de lo que me preocupo por mí mismo, esto significa que no restringí mi ego ni pensé en una cierta acción que me asemejara al Creador.

Así que primero nosotros debemos pesar, medir y organizar nuestras relaciones con el entorno en nuestro trabajo. Sólo a través del entorno cumplimos nuestro libre albedrío. El Creador también se encuentra en el entorno. Si yo muestro la actitud correcta hacia la sociedad, hacia los amigos, las vasijas más anchas se abren para mí, como si me mudara a una dimensión más interna, y allí yo revelo la conexión con el Creador. Una de ellas está dentro de la otra (como las muñecas huecas de encajar). Esto significa que la conexión con el Creador se revela en el grupo. Es imposible descubrirlo de otra manera. Finalmente tengo que ver cómo se une el mundo entero a la garantía mutua, ya que todo éste me pertenece, todo es mío.

De la 1º parte de la lección diaria de Cabalá del 10/01/13, Shamati # 38 «El temor de Dios es su tesoro»

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *