Una bendición en vez del juicio

LaitmanWeisman, «Sefer Midrásh», «Después de la muerte de», «El trabajo santo en Yom Kippur»: Para Yom Kippur ustedes deben preparar de antemano a la persona, quién debe llevar al macho cabrío al desierto, el cual está destinado para Azazel, y despeñarlo por un acantilado allí. El Creador ha prometido que por medio de este trabajo santo los pecados de toda la congregación de Israel serían perdonados.

Aquel que llevó el macho cabrío al desierto por lo general mueren antes de fin de año y de esta forma esta misión se la dieron a persona que fue condenada a morir ese año…

El gran sacerdote no podía abandonar el patio interior hasta entonces ni continuar el trabajo santo hasta que el macho cabrío estuviera en el desierto…

En aquellos días en los que la nación judía era una nación de justicia, ellos sabían de la llegada del macho cabrío al desierto cuando el hilo rojo que estaba atado en el Lugar Santísimo se tornaba blanco.

La persona que es mensajero de toda la congregación, es decir de todos sus deseos, descubre en su interior esos deseos que no pueden ser corregidos y los mata.

Él despeña al macho cabrío (sus deseos no corregidos) desde el acantilado, de acuerdo a sus sensaciones, según sus evaluaciones, y de acuerdo a su balanza y estos mueren, dado que no puede corregirlos y así ella asciende aún más alto.

Tales atributos llamados el animal en nosotros son elegidos en cada uno de nosotros. La persona no corregida y el macho cabrío no corregido pueden complementarse entre sí. El estado del animal en nosotros es corregido de esta forma cuando la arrojamos desde el acantilado y rompemos estos deseos.

Gracias a este estado, el ser humano en nosotros muere. La parte sin corregir en nosotros ha de morir durante ese año. Su muerte es lo que es bueno para nosotros, es nuestra recompensa. Cuando el estado llamado el animal en nosotros muere, ascendemos. Esta es una gran alegría, una sensación de corrección y libertad de esos deseos egoístas, de los que no podíamos deshacernos antes.

Se nos dice que ellos sabían acerca de la llegada del macho cabrío al desierto cuando el hilo rojo atado al Lugar Santísimo se tornaba blanco. Esto significa que ahora todos los atributos de Din (juicio) se convierten en atributos de Jesed (misericordia), lo cual significa que los pecados de la nación han sido perdonados y ella se libera de los deseos no corregidos.

Esto debe a que toda la nación envía al macho cabrío al desierto y así todos sus deseos sobre el nivel animal son arrojados y rotos. Así, en lugar de la sentencia del Señor, la nación recibe la bendición del Señor.

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Del Kab.TV «Los secretos del Libro Eterno» del 3/12/14

 

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