¡Haznos desear!

¿A quién ayuda el Creador, la Fuerza Superior, la propiedad omnipotente de otorgamiento, la naturaleza? Ayuda a aquellos que desean ser como él.

Se trata de personas que «confían en su misericordia», es decir que se anticipan a recibir corrección y obtienen la propiedad que gobierna la naturaleza: el atributo de otorgamiento. La propiedad llamada «la gracia superior» viene específicamente a aquellos que han alcanzado tal deseo.

Esencialmente, todo es hecho de acuerdo con deseo de una persona. Tengo que trabajar en el mío para cambiarlo y mejorarlo hasta que realmente yo desee otorgar. Entonces, adquiriré el atributo de otorgamiento. Por lo tanto, debemos pensar constantemente sólo acerca del deseo.

A decir verdad, no puedo empezar a querer un nuevo deseo de otorgar. Si yo lo hubiera querido, ya estaría en él. Después de todo, además del deseo, no hay nada más, por lo que querer otorgar es ser quien otorga. En cuanto al otorgamiento, una persona recibe de inmediato lo que desea para el grado correspondiente.

Sin embargo, seguimos moviéndonos desde el deseo de recibir al de otorgar deseando otorgar no de manera seria, sino sólo por diversión. Por lo tanto, nuestro trabajo siempre se reduce a una plegaria que nos haga desear otorgar. Entonces, recibimos el deseo de otorgar seguido por una oportunidad para realizar esta propiedad.

(33754 – De la 1º parte de la lección diaria de Cabalá del 26 de Enero del 2011, Escritos de Rabash)

Material Relacionado:

La paz entre nosotros es el creador entre nosotros

La revelación tiene una respuesta para todo

Trabajando entre el más y el menos, entre el amor y el odio

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *