¿Cómo podemos gritar para ser escuchados?

Lo que estamos creando entre nosotros es interconexión, interdependencia, garantía mutua, amor y una necesidad definitiva de estar juntos. Esta es la conexión (o el lugar) que nosotros debemos crear para que así dentro del mismo, revelemos al Creador, quien se esconde de nosotros. El nos hablará desde este lugar que nosotros estamos creando, “la tienda de la revelación”.

Sin que tengamos este sistema de comunicación entre nosotros y el Creador, sólo estamos pidiendo a gritos al vacío. Sólo podemos recurrir a la imagen que se forma a través de nuestra conexión que es el Templo Del Creador.

Está escrito que el amor al Creador sólo puede alcanzarse a través del amor a los demás. Esta es la razón por la que estamos construyendo un sistema espiritual de garantía mutua y ayuda entre nosotros. El propósito de esto es la revelación del Creador.

Por lo tanto, nuestra primera necesidad es trabajar en la construcción del grupo. La primera condición para recibir la Torá, la Luz de la Corrección al pie del Monte Sinaí (el estado de revelación de odio mutuo) fue la imposibilidad, pero con la disposición de unirnos todos como un solo hombre con un solo corazón, y trabajar en esta unidad bajo el principio de “Haremos y escucharemos”.

No importa cuán pequeña sea nuestra disposición de hacer esto, si la tenemos, entonces tenemos un punto común: una “ventana” a través de la cual podemos revelar al Creador. Este punto común es ya Maljut del Mundo de Atzilut, la Shejiná.

Es así como debemos entender la preparación para la recepción de la Torá.

Material relacionado:

El personaje principal en el libro cabalístico
Llego el tiempo de actuar
Para no gritar en el desierto

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *