Nosotros somos inconscientemente manejados por las intenciones a fin de recibir. No hay nada que podamos hacer al respecto, dado que así nacimos. Pero si realizamos las acciones correctas, aunque nuestra intención siga siendo incorrecta, es decir, si corporalmente tratamos de estar en un círculo, en conexión, y atraídos hacia la garantía mutua tanto como podamos, de esta manera nos adecuamos a la Luz superior, incluso sin la intención a fin de otorgar.
Nosotros mismos no nos adaptamos a la Luz superior, más bien a su iluminación desde la distancia llamada la Luz Circundante. Esta Luz Circundante comienza a afectarnos de acuerdo a nuestros esfuerzos por alcanzar la conexión, por alcanzar «No les hagas a los demás lo que odias que te hagan a ti», «ama a tu prójimo como a ti mismo», y en conexión y la auto anulación. Incluso si estas acciones no van acompañadas de la intención a fin de otorgar, aun así nos acercan la Luz que Reforma y gracias a ello, nosotros vamos adquiriendo la intención a fin de otorgar. Por lo tanto nuestras acciones adquieren la intención de otorgamiento y comenzamos a ascender la escalera espiritual.
Por eso se nos dice que «las Mitzvot (mandamientos) no requieren una intención», y que incluso las acciones sin la correcta intención pueden empezar a corregirnos y a llevarnos al primer nivel espiritual, al nivel de Nefesh de Santidad. El camino espiritual comienza desde este nivel. Entonces nuestras acciones se vuelven más centradas, con la intención de Lishmá (por Su beneficio), para el Creador, de manera más consciente. Nosotros realizamos 613 correcciones en cada nivel: 613 correcciones en el nivel de Nefesh, 613 correcciones en el nivel de Ruaj, 613 correcciones en el nivel de Neshama, 613 correcciones en el nivel de Jaya y 613 correcciones del nivel de Yejida y entonces somos recompensados con la gran Luz, la Luz de Ein Sof (Infinito).
Pregunta: ¿Por qué dice «una Mitzvá sin intención es como un cuerpo sin alma»?
Respuesta: Se trata de las Mitzvot reales, pero lo que hacemos ahora no es una Mitzvá. Se dice que «una persona es recompensada con la meta de la creación, al observar la Torá y las Mitzvot«. Torá es la Luz que Reforma, que viene y corrige nuestros deseos con la intención a fin de otorgar. La corrección es llamada Mitzvá.
Esto significa que la Luz Superior realiza la Mitzvá al corregir el deseo, pero es la persona quien atrae la Luz Superior. La persona que atrae la Luz Superior aún no tiene la intención correcta, y sólo lleva a cabo todas las acciones a fin de convocar a la Luz que Reforma. Cuando la Luz llega, ésta ya realiza las correcciones que llamadas Mitzvot. Así que nuestro rol es sólo llevarnos a nosotros mismos constantemente a un estado o estabilizar el estado más cercano a la Luz Circundante, a la Luz que Reforma.
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De la preparación para la Lección diaria de Cabalá del 10/8/13
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