Dos idiomas, una raíz

Dr. Michael LaitmanSi sentimos que algo en la convención se perdió, es sólo debido a que todavía no estamos listos para esto y ahora tenemos que trabajar en ello. Esto significa que debemos convocar la sensación de conexión entre nosotros con el fin de descubrir al Creador (la Luz) en esta conexión. Por consiguiente tanto el medio (el grupo), como la Torá (la Luz) nos llevarán hacia el Creador, de acuerdo a la regla «Israel, la Torá y el Creador son uno».

El punto es que en la antigua Babilonia ellos hablaban arameo, el cual desde entonces es paralelo al hebreo. El hebreo y el arameo provienen de la misma raíz y son dos idiomas opuestos. El un idioma trasmite la información a través de las vasijas y el otro a través de la Luz: El arameo lo hace a través de las vasijas, de los deseos, mientras que el hebreo lo hace a través de las sensaciones. No hay nada más que estos dos atributos y de esta manera estos dos idiomas existen en paralelo.

El Talmud Babilónico que todos estudian hoy en día está en arameo, ya que se trata de la corrección de las vasijas. Todo el Talmud es un sistema de corrección de las vasijas, de los deseos, pero está descrito como los estados  de la naturaleza de los deseos inanimados, vegetativos y animados. La Torá, sin embargo, (la cual se deriva de la palabra Luz) está en hebreo, ya que proviene de Arriba. Esto significa que el Talmud proviene de abajo y la Torá de Arriba.
(113072)
De la 1º parte de la Lección diaria de Cabalá del 7/21/13, «Fe por encima de la razón»

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