El camino para la revelación del mundo superior

Dr. Michael LaitmanHoy, es fácil revelar la sabiduría de la Cabalá, después de 2,000 años de exilio.

La gente viene a estudiar la sabiduría de la Cabalá, porque el deseo de descubrir el sentido de la vida se enciende en ella. Busca algo, escucha algo e incluso, sin saber lo que es la sabiduría de la Cabalá, entiende con su sexto sentido que la necesita y, por eso nos encuentra.

El individuo comienza a asistir a reuniones del grupo y a estudiar, cada uno a su manera. Luego empieza a participar en el estudio, en diferentes eventos, en las comidas y la fuerza del grupo empieza a afectarle.

No es la fuerza de un grupo común, sino una fuerza espiritual. Brilla en él como a través de una lupa y comienza a sentir sus cambios internos.

Incluso cuando estudiamos en la universidad diferentes cursos o, cuando estudiamos diferentes métodos llamados psicológicos o espirituales, sentimos diferentes cambios internos, en nuestra mente y sentimientos, pero estos son, sentimientos corporales normales.

Aquí, por otro lado, empezamos a sentir el renacimiento del egoísmo. Si la persona es entusiasta, al principio avanza resueltamente, pero luego empieza a sentir una especie de embotamiento, oscuridad, debilidad. ¿De dónde viene eso? ¿por qué? ¿con qué propósito? Todo está perdido; ya nada le interesa; se siente impotente… ¿qué le pasa?, surge un egoísmo adicional y no hay fuerza en el mundo para superarlo.

Para superarlo, tenemos que recibir Luz, fuerza de lo alto, del siguiente estado, de un estado superior, del mundo superior.

Si seguimos estudiando de cierta forma y avanzamos, poco a poco salimos de ese estado y llegamos al siguiente, luego caemos de nuevo y una vez más nos encontramos en un estado bajo, sin esperanza. No entendemos de dónde viene ni cómo surge el egoísmo y una vez más nos arrastramos para salir de ese estado.

Así, nos sometemos a muchos descensos y ascensos; así es como la Luz Superior opera en nosotros.

El camino espiritual es como un cardiograma. Nos movemos arriba y abajo, de más a menos. Estos movimientos pueden ser muy frecuentes o muy escasos. Todo depende de la intensidad de nuestra participación en el grupo.

Muchos no aguantan y se van. Si la persona se va, todo lo que logró permanece como menos, porque el egoísmo se reveló y pudo haber ascendido por encima de él y, eventualmente, lograr el mundo superior.

Pero si la persona estudia por muchos años, logra un estado, que se revela en ella como un gran descenso. Durante este descenso, causado por una fuerza superior especial en su nivel específico, comienza a sentir que lo único que puede ayudarle es la conexión a la fuente de esta fuerza, al Creador. Empieza a demandarle al Creador. Este es su primer contacto con la fuerza superior.

Empieza a darse cuenta que el Creador,desde arriba, provocó su descenso a ese terrible estado,  para que pueda igualar estos dos niveles dentro de ella y, para que no esté en ese estado de ascenso y descenso, sino que conecte los dos niveles.

Por otra parte, el nivel inferior tiene que ser como Maljut y el superior como Keter y las diez Sefirot entre ellos. Entonces se crea un Partzuf espiritual o un alma, gracias a que la persona equilibra los dos polos dentro en uno solo.

Dr. Michael Laitman

En el pasado, sufrió descensos y ascensos, ahora parece provocar un cortocircuito entre ellos, en sí, centrándose en «no hay nada más que Él», tanto en el estado positivo como en el negativo. Todo lo que se recibe en el estado negativo, se debe a su estado positivo y todo es para llevarlo a la conexión, a la comprensión del Creador, porque ahora puede sentir y comprender su propia interioridad, su estado absoluto y su singularidad, en sus sentimientos negativos y positivos. Si una persona alcanza este estado, puede ser llamado, el nacimiento del alma.

De acuerdo con la sabiduría de la Cabalá, en contraste con otros métodos corporales, el tiempo que se tiene que pasar por este proceso, hasta que se llega a ese estado, puede tomar hasta diez años. Los cabalistas no ocultan este hecho. No debemos tener miedo, es mejor avanzar con decisión para convertirnos en humanos en el siguiente nivel de desarrollo humano, en el mundo superior.
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De la lección de Cabalá en ruso 15/may/16

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