Pregunta: ¿Por qué tengo que corregir lo que el Creador creó? Siento como si estuviera protestando contra Él.
Respuesta: Tenemos que protestar para que, a pesar del ego, podamos unirnos y conectarnos. Es como un rompecabezas que los padres compran para un niño y le piden armar las 50 o 100 piezas.
Estos esfuerzos desarrollan al niño porque tiene que imaginar cómo conectar las partes separadas. También nosotros, si nos conectamos en el rompecabezas completo y correcto, veremos una imagen llamada el ‘mundo por venir, el mundo superior’.
Pregunta: ¿Es este mundo por venir, el mismo que alcanzamos después de la muerte?
Respuesta: El mundo por venir lo vemos en esta vida. Se caracteriza como el nuevo, el que se acerca, en el que alcanzamos una unidad maravillosa, ‘como una persona con un corazón’ y ‘amarás a tu prójimo como a ti mismo’. Gracias a esta conexión, empezamos a descubrir un nivel totalmente nuevo entre nosotros.
Somos cambiados internamente de modo que empezamos a sentir que todos estamos conectados. Gracias a esto, la humanidad está integrada y unificada con el resto de la naturaleza: los niveles inanimado, vegetal y animal, se unen a la humanidad. Entonces la persona comienza a entender y sentir el mundo, de manera que lo incluye dentro de sí mismo.
Eso es lo que cada uno comienza a sentir: yo, tú, él y todos. Porque todos nos integramos en una sola fuerza, un sólo deseo, un pensamiento único y gracias a esto, alcanzamos un mundo totalmente bueno. Nos elevamos por encima de la vida y la muerte, por encima de todos los problemas y dificultades, aquí y ahora, en este mundo, como está escrito: ’Verás tu mundo en tu vida’ (Berajot 17a).
Todo está a nuestro alcance; así que ven, tomemos ventaja de esta oportunidad correctamente. Pensemos en esto; sólo a través de nuestra conexión y unidad habrá salvación para nosotros y para el mundo entero.
[167327]
De la programación de Radio israelí 103FM, 22/sep/15
Material relacionado
Uniéndonos por encima de todas las diferencias
Que no se nos expulse de las puertas del Mundo Superior
El maravilloso mundo de mañana