El pedal de embrague con la naturaleza

Dr. Michael LaitmanBaal HaSulam, «La Paz: «Debido a que el propósito, se construye indudablemente sobre todas las leyes de la naturaleza, sin excluir ninguna,… aquel que altera incluso una sola, daña la ley y daña el propósito intencional que el Creador ha establecido, y por lo tanto será castigado por la naturaleza. Por lo tanto, tampoco nosotros, las criaturas del Creador, sentiremos compasión porque él está profanando las leyes de la naturaleza y deshonra el propósito del Creador.

De aquí se hace evidente que, si yo veo que alguien está actuando en contra de las leyes de la naturaleza, tengo que detenerlo, puesto que nosotros nos encontramos en un sistema, y si una persona va en contra de una de sus leyes, entonces, necesariamente, tiene una mala influencia sobre toda la naturaleza y sobre todos.

En general, todas las acciones de ustedes deben ir acompañadas de una comprensión de lo que están haciendo. Esto se debe a que están influyendo en un gran mecanismo colectivo, en la conexión mutua de una multitud de partes, integral y globalmente. Si no conocen las leyes de la naturaleza, esto no significa que ustedes no causarán daños.

La naturaleza acepta su acción como es, y si la intención es buena o mala, o hay falta de intención, esto ya es superfluo. Sin embargo, sea como sea, desde un punto de vista materialista, nosotros tenemos que entender que en esencia, nosotros nos encontramos en un sistema cerrado y, por tanto, todos dependemos de los demás. Nadie puede sentirse libre de la obligación de no dañar el sistema.

Después de eso, es posible continuar. ¿He sido eximido también de beneficiar al sistema? Y, si lo piensan, bueno, no lo estás. Esto se debe a que, en un sistema cerrado, cada uno tiene su lugar y su función, y por lo tanto, cada uno está obligado a no dañar el sistema y está obligado también a beneficiarlo, y nadie tiene libertad de elección con respecto a esto. Por el contrario, todos estamos obligados a ser partes corregidas dentro de él, a ser partes beneficiosas para el sistema.

Sin embargo, entre todas las partes del sistema, todavía hay otro mecanismo llamado un «embrague». Cuanto más lo presionemos juntos, como si estuviéramos soldados entre nosotros en el sistema general, y dependiendo del grado de nuestra adhesión mutua, este «pedal» se libera gradualmente cada vez más, elevando la dependencia mutua, y nosotros estamos obligados a actuar en consecuencia, a no hacer daño y traer beneficios de acuerdo a los «mandamientos negativos» y a los «mandamientos positivos«.

(115773De la 4º parte de la lección diaria de Cabalá del 28de agoato del 2013, Escritos de Baal HaSulam «La Paz»)

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