La economía de la sociedad futura

Pregunta: ¿Podría dar un ejemplo para mostrar cómo debe ser la economía de la sociedad futura a la qué debemos llegar?

Respuesta: Es muy simple, y aquí hay realmente mucho que pensar. Para empezar, nosotros necesitamos tomar las cosas tangibles que gradualmente nos ayudarán a llegar a una comunicación y definiciones más abstractas.

Vemos que nuestra economía está atravesando una grave crisis. Esta debe «reducirse», volverse una economía de consumo razonable. Esto sucederá ya sea que lo queramos o no. Si realmente lo quisiéramos, podríamos comenzar a restringirla gradualmente y a liberarnos de los excesos y de las cosas que no necesitamos.

En un principio, podríamos eliminar toda la publicidad. No debe haber publicidad, sino anuncios sobre las cosas razonables y útiles que la gente necesita para que las personas sepan que aquí existen cosas normales que hacen la vida más fácil.

Incluso ahora, cada país y cada sociedad tiene una canasta de consumo necesaria que todas las persona debe tener para mantenerse a sí mismas, tales como alimentos, medicinas, accesorios necesarios, y así sucesivamente. Nosotros también debemos tener una canasta de este tipo, pero no una mínima, una canasta de consumo extendido para una existencia normal y razonable. Toda la otra producción debe ser restringida.

Al restringir paulatinamente la producción innecesaria, en primer lugar, recibiremos una gran cantidad de energía, lo cual es una muy buena cosa. ¿Por qué desperdiciarla? Tendremos abundancia de recursos naturales. Dejémoslos para nuestros hijos y nietos. En otras palabras, llegaremos de manera práctica a un punto en el que seremos capaces de vestirnos, alimentarnos y de equipar a toda la humanidad con un nivel razonable.

Esta es la economía del futuro a la que debemos llegar gradualmente, en otras palabras, por un lado, la deflación del consumo excesivo y, por otro lado, la elevación de toda la humanidad al nivel de existencia normal. El logro de este nivel es nuestro objetivo inicial. De esta manera, nosotros nos encargamos de nuestra existencia animal, asegurándonos de que sea igual para todos.

Imaginen la revolución psicológica que tenemos que crear en la gente, pero esto no puede hacerse sin la educación integral de las personas. Antes de encargarnos de la economía, es necesario que les mostremos a las personas la necesidad de alcanzar el siguiente nivel. Este siguiente nivel, en el que formamos una sociedad que llamamos el nivel humano, el Hombre, Adam, determina nuestro descenso voluntario al nivel de consumo razonable.

Es necesario crear un programa de transición gradual hacia esto porque lo principal no es el resultado final, sino una transición suave, multinivel. Aquí, debemos tener de manera simultánea formación integral, educación integral, y reducción gradual de la producción innecesaria, así como un aumento gradual en el servicio a la población con la formación integral y la educación, en otras palabras, la reestructuración de todos los medios masivos de comunicación para hacer un trabajo educativo. Cuando la humanidad se ocupa de la transformación de sí misma, es como una máquina mundial enorme.

Por último, la humanidad estará ocupada consigo misma, pero no para presumir ante su vecino por tener un billón más o humillar a alguien mostrándole que él es más fuerte, sino con el propósito de lograr la integración.

(85299)
De una «Charla sobre formación integral» del 2/29/12

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