La responsabilidad, la Luz, y las predicciones de los profetas

Dr. Michael LaitmanPregunta: Por un lado, tenemos que sentirnos responsables del antisemitismo en todo el mundo y por todos los malos acontecimientos que suceden, porque no estamos cumpliendo con nuestro rol.

Por otro lado, nosotros debemos relacionamos con estos asuntos sólo con el Creador, dado que «no existe nadie más aparte de Él». Para mí, esto es muy confuso. No sé cómo relacionarme correctamente con esta situación.

Respuesta: Desde «no existe nadie más aparte de Él», entendemos que todos los problemas provienen de Él. ¿Quién los moldea? El Creador. Pero ¿por qué hace? Porque Él tiene que llevarnos a un estado de completa corrección (Gmar Tikkun). ¿Por qué, Él nos envía los problemas y los hacen tan terribles? Porque todavía no hemos logrado similitud de propiedades con Él hasta tal grado que podamos considerar Sus actos como actos de benevolencia.

A menos que uno alcance la revelación, es incapaz de comprender la imagen completa. Al aplicar esfuerzos sin darnos cuenta de la esencia del por qué exactamente estamos esforzándonos, le damos aún más placer al Creador. Nosotros tenemos que aceptar este estado de cosas.

Hay varios aspectos que debemos tener en cuenta al respecto. Por todos los medios, el Creador organiza todo de acuerdo al programa que tenía previsto de antemano y por medio del cual Él quiere llevar a todos a la unidad y hacer que nuestra conexión sea similar a la Luz Superior. Para ello, todos los fragmentos rotos de la creación deben reconectarse y otorgarse unos a otros, logrando así similitud con la naturaleza otorgante de la Luz

De esta manera deben reunirse todos los 600.000 fragmentos para que la forma de otorgamiento mutuo entre ellos se vuelva similar a la Luz que los llena. Este tipo de otorgamiento de hecho es la Luz que los llena. ¡No existe otra Luz! Sólo existe el atributo de otorgamiento y amor.

Cuando nos corregimos a nosotros mismos y nos relacionamos con los demás con amor y otorgamiento, la Luz llena nuestra vasija, Kli. ¡Nunca habrá nada, además de este! Construiremos este tipo de relaciones entre nosotros con la ayuda del Creador, de la Luz Retornante.

Entonces, esto significa que recibimos la energía desde Arriba que nos permite conectarnos con los demás en la medida de nuestra necesidad de conectarnos; nuestra unidad es de hecho la Luz que nos llena. No necesitamos nada, además de eso, la conexión general que construimos es el Creador. ¡Nosotros somos los que «construimos al Creador»! Nosotros somos los que tenemos que rellenar todos los estados que atravesamos. Cualquier cosa que nos suceda es una revelación de la ruptura.

Esto explica por qué los profetas escriben sobre cosas que están a punto de suceder antes del final de la corrección. Ellos describen guerras, masacres y otros eventos terribles porque vieron la vasija general, el deseo, completamente fracturado de arriba a abajo. En cada una de sus capas, previeron qué podría suceder. Sintieron el futuro porque eran conscientes de las terribles relaciones entre los elementos de la vasija rota.

Sin embargo, sus predicciones se harán realidad solo si no corregimos el mal que está revelándose gradualmente en nosotros. El mal se despliega de acuerdo a nuestra disposición para corregirlo. Cuando estemos listos, atravesaremos el proceso de la revelación del mal en nosotros con deleite, como escribió Baal HaSulam: «Estoy feliz de ver a los pecadores que surgieron».

(148065)
De la 5° parte de la lección diaria de Cabalá del 11/19/14, Escritos de Baal HaSulam

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *