Qué le gusta al Creador

thumbs_laitman_929¿Qué hemos hecho para llevarle nuestro mensaje al mundo? Y de hecho, ¿para qué? Para acelerar nuestro desarrollo, a fin de alcanzar algún tipo de realización.

Baal HaSulam dice que el mundo entero debe ser como una familia y nosotros debemos construir una sociedad que se corresponda con las nuevas condiciones. Y aquí, cuando en última instancia empieza a revelarse algo más grande entre nosotros, todavía no existe un acuerdo absoluto entre nosotros sobre la necesidad de invertir toda nuestra energía en la difusión.

Pero sin esto, no puede formarse la «deficiencia» en la persona. Y, ¿cómo puede avanzar espiritualmente sin ella? Alguien que no va sale hoy hacia las personas, mañana ya no tendrá una oportunidad como esta. Ella perderá este peldaño y luego será muy difícil que pueda completarlo.

Por lo tanto es necesario que hagamos todo lo que podamos. Precisamente ahora nos toca a nosotros trabajar en la conexión, trabajar activamente. No importa que ocurra a continuación, los resultados que se ven son secundarios. Nadie sabe qué es bueno y qué es malo para nosotros. Nadie sabe de qué manera avanzaremos. Lo más importante es «correr adelante de la máquina». Y entonces sin importar cómo sea el desarrollo entre la vasija y la Luz, veremos algo positivo en éste. Porque nosotros somos la «medicina preventiva para el golpe», es decir que todo el proceso se habrá vuelto deseable para nosotros a pesar de todo. Será tan lógico que incluso los más terribles acontecimientos que sucedieron en la historia humana, los horrores en los que no queremos pensar, fueron hitos obligatorios necesarios en el camino hacia el final de la corrección.

Y esto también afecta a las personas a través de los cuales este se realizó. Los peores villanos serán como ángeles del Creador para nosotros.

Así, nos cambiará la comprensión de la realidad cuando actuemos de acuerdo al principio, «no existe nadie más aparte de Él y Él es el bien que hace el bien»; y la Luz Superior llena toda la realidad. Esto es lo que sentiremos si avanzamos a través de las correcciones con «una onza de prevención».

Desde la altura de Jafetz Jesed, todo lo que sucede, todos los problemas se aceptan con alegría y una bendición. Y de nosotros depende el equiparnos con un enfoque de este tipo, para aceptarlo todo como si fuera lo mejor. No para que no sentir los sufrimientos, sino para «hacer una bendición por el mal así como por el bien». Lo más importante es no estar enojados con el Creador y no estar maldiciéndolo a Él. No por temor, sino a partir de la conciencia de Su grandeza. Porque  Su característica, la característica del amor y otorgamiento es grande ante mis ojos.

Depende de nosotros el mantener esta dirección. Ahora, cuando ha llegado el momento de actuar, nosotros debemos crecer y expandir todo el tiempo una relación como ésta dentro de nosotros. Yo salgo a difundir a fin de absorber y digerir mis deficiencias externas. Sí, son mías, pero mientras tanto las siento como externa, porque todavía no me he conectado internamente con ellas.

De hecho, el mundo entero es mi deficiencia pero está dividido en dos partes: por dentro y por fuera. Y a continuación, cuando trabaje con ellas, yo las recibiré como cosas esenciales. Las necesidades de los demás serán más importantes para mí que mis propias necesidades. Porque dentro de ellos yo descubriré la Ohr Jojma, la Luz del propósito de la creación, que es mucho mayor que la Ohr Jassadim, la Luz de Corrección. Los deseos de los demás serán los más importantes para mí.

Ellos son lo más querido del Creador, porque dentro de las deficiencias de las «naciones del mundo» lo descubrimos a Él en Ohr Jojma, y en nosotros lo descubrimos a Él sólo en Ohr Jassadim. Nosotros somos la característica de Bina y ellos son la característica de Maljut que de acuerdo con la disposición contraria de Luces y Kelim responde con la más elevada Luz, Ohr Yejida. Y específicamente en ellos se revela la unidad del Creador.

Y nosotros, los «más pequeño de todos los pueblos», en última instancia, lo concedemos todo, al final, sólo con el fin de elevarlos al nivel de Keter.

Por lo tanto, si las deficiencias de ellos son lo más importante para mí y trabajo sólo por amor a ellos a fin de satisfacer al Creador, yo seré el conducto entre lo que está abajo y lo que está arriba, entonces todo estará bien. En otras palabras, yo seré realmente capaz de satisfacer al Creador.

(117537 – De la 4º parte de la lección diaria de Cabalá del 9/29/13, Escritos de Baal HaSulam)

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *