Solo, en la multitud de millones, parte 1

Pregunta: La soledad es un azote de la sociedad moderna. La sensación interna de soledad vive en el hombre rodeado de mucha gente. Sobre todo, este fenómeno es común entre los jóvenes y está ganando impulso y fuerza.

Los adolescentes pasan medio día en la escuela donde están rodeados por muchos amigos y la otra mitad del día, la pasan en la computadora, en redes sociales virtuales, sin embargo, todos sienten soledad.

Otro grupo que siente el problema de la soledad especialmente agudo, es el de personas mayores de 65 años, pero en general, la soledad afecta todas las edades. Incluso al niño pequeño que se queja de estar aburrido, de hecho, quiere decir está solo y no tiene con quien jugar.

Obviamente, la soledad es un sentimiento interno no relacionado con la cantidad de gente alrededor, ¿por qué la gente se siente sola?

Respuesta: El problema de la soledad surgió a mediados del siglo pasado y creció más y más, a medida que la humanidad alcanzaba la cima de su desarrollo.

A mediados del siglo 20, el hombre completó el desarrollo ‘lineal’ de su naturaleza egoísta, que duró miles de años. El crecimiento del egoísmo lineal terminó; el mundo se volvió integral y global y, se convirtió una pequeña aldea donde todos dependen de otros.

El desarrollo ha contribuido a que hoy sea fácil viajar de un extremo a otro del globo. Antes, la gente viajaba sólo por negocios y comercio. En el mundo moderno, pareciera que todos viajan a algún lugar, ¿cómo podemos sentirnos solos? El turismo es el negocio más desarrollado y poderoso en el mundo, pero al mismo tiempo, la gente sigue estando sola.

Tal vez por eso nos movemos todo el tiempo. Tal vez esperamos llenar este vacío interno, esta necesidad? Pero, no ocurre. Por el contrario, el turista llega a un país extranjero para separarse de los demás aún más.

Parece que va de viaje para ver el mundo, para familiarizarse con otros países. Pero, donde quiera que va, siempre permanece solo, sintiéndose incluso más solo que en casa. El hecho de que el mundo está cada vez más conectado externamente y más individualista y separado internamente, es una paradoja.

De la misma manera, la gente es interdependiente en negocios y trabajo y las culturas se influyen mutuamente, pero personalmente nadie se beneficia ni siente necesidad ni deseo de esto.

El ego en el hombre crece individualmente y al mismo tiempo, el mundo que nos rodea forma un sistema global. Hay una brecha entre el mundo  interconectado y gente que no quiere ninguna conexión. Por el contrario, el ego crece y se convierte en individualista cada vez mayor.

Por lo tanto, vemos que el hombre moderno no quiere aceptar este mundo y el mundo no lo acepta a él. Simplemente no encajamos en el marco que la naturaleza nos hizo. La naturaleza quiere que estemos juntos, ligados con relaciones amables, pero nosotros no queremos.

El mundo fácilmente puede darnos todo lo que necesitamos: comida, ropa, medicina, vivienda, absolutamente todo, pero no queremos unirnos como el mundo nos lo pide. Por el contrario, todos quieren estar solos. Hace tiempo, toda la familia podía vivir en una habitación y varias familias en una casa. Los recién casados vivían con sus padres. Pero hoy, cada adulto y cada niño necesita tener una habitación separada.

La tecnología moderna impulsa esta tendencia (es natural, trabaja para el consumidor). Como resultado, todos tienen teléfono móvil y correo electrónico personal.

El egoísmo evoluciona dentro del hombre, aislándolo cada vez más y nos obliga a pensar, qué más hacer. Después de todo, nuestro deseo de disfrutar requiere una satisfacción que no puede ser obtenida por uno mismo.
[207218]
De Kabtv «Una nueva vida» 4/abr/17

Material relacionado:
Una nueva vida #846 – Soledad
EUA – no es sólo Hollywood
La Guerra Contra Amalek

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *