Un final feliz para la humanidad

El coronavirus nos privó de la confianza en el futuro, está cubierto de niebla. No sé qué pasará conmigo y mi vida, mañana o dentro de un mes, qué pasará en el trabajo y en el hogar.

¿Cómo se puede vivir en un mundo tan impredecible? Esta imprevisibilidad se debe a que nos estamos acercando a un nuevo mundo con estándares viejos y egoístas, ese mundo aparece ante nosotros, gradualmente, como espejismo en el desierto.

Se acercan cada vez más, pero aún no lo vemos correctamente porque aún nos tratamos con egoísmo. Es como si caminamos por un  sendero y de repente, entramos en una ciudad desconocida, donde algunas relaciones entre residentes son incomprensibles para nosotros y nos sorprende es lo que sucede allí.

Eso es lo que estamos viendo ahora. No nos damos cuenta de que entramos en una nueva era y que la naturaleza nos exige tener relaciones completamente nuevas, unirnos de acuerdo con la ley de amar al prójimo como a uno mismo. Y estamos perplejos por lo que se requiere de nosotros, como niños pequeños a quienes la madre dice: “¡Dejen de pelear, sean buenos niños! ¿Por qué no pueden jugar juntos?

Pero no puedo, mi naturaleza exige peleas todo el tiempo; es la única forma en que siento esta vida. Y no importa que mi madre me reproche, no quiero escuchar y me escapo y vuelvo a reñir. Así está la humanidad hoy.

¿Cómo puedo convencerme de cambiar y sanar de una forma nueva? Pues, tan pronto como construyamos una red de comunicación mutua, basada en otorgamiento, amor y unidad, inmediatamente veremos dónde estamos. De repente, nos encontramos en un mundo completamente diferente que no habíamos notado antes.

Así los niños corren, entre adultos, sin prestarles atención, como si fueran muebles. Los niños tienen sus asuntos entre ellos y los adultos sólo interfieren. Y de repente, los niños crecen y comprenden que hay un nuevo significado, nuevas relaciones, otro programa, un objetivo grandioso y elevado, por el que también vale la pena luchar. Este es el estado en el que estamos hoy.

Este es un período muy importante y aunque se manifestó en forma de epidemia, no debería dañarnos. Creo que el coronavirus cambiará radicalmente a la humanidad.

Todos tenemos la misma condición y si gradualmente cambiamos de odio y competencia a comunicación y apoyo mutuos. Comenzaremos a relacionarnos con la vida y con nuestro mundo global e integralmente, como la naturaleza nos enseña y, esta historia tendrá un final feliz para nosotros mismos y para nuestros hijos.
[264762]
De Kabtv “El mundo» 12/mar/20

Material relacionado:
Coronavirus y la nueva humanidad
La corrección de los deseos de la humanidad
¿Qué pasará con el alma común si la humanidad se extingue?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *