El afinado espiritual

Tomado de “Los principios de la educación global”: La esencia de nuestro desarrollo reside en el reconocimiento del mal.

Somos capaces de realizar acto tras acto solo de acuerdo con nuestro reconocimiento del mal, según el punto de nuestra sensibilidad acerca del bien y del mal. Todo depende del nivel en el cual nuestras propiedades nos permiten medir la diferencia entre ambos.

Mi deseo es como un instrumento de medición. El puntero se mueve una medida, si digamos, cambio mi tensión interior o peso algo en mi escala interior. Existen balanzas con divisiones de 100 libras para carros y balanzas precisas que pesan miligramos.

Mis medidas dependen también de la sensibilidad. Tan pronto como siento dentro de mi alguna diferencia entre las dos fuerzas, se activan mi acción y mi respuesta. Me siento mal debido a esta diferencia; estoy insatisfecho y preocupado. Entonces surge un impulso dentro de mí y me empuja de vuelta hacia el punto de equilibrio desde donde nos originamos.

Esta es la razón por la cual todo depende del reconocimiento del mal. Tengo que intensificar este sentimiento una y otra vez presionando el “botón” que se ajusta cada vez más. Al igual que el punto inicial de la creación sintió que era diferente de la Luz hasta que esta disparidad se convirtió en la oscuridad de su completa oposición, de la misma manera elevo la sensibilidad hacia la Luz dentro de mí, para finalmente lograr la corrección.

(39225 – De la 4º parte  de la lección diaria de Cabalá del 27 de Marzo del 2011, los principios de la educación global)

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