La cantidad que desarrolla una nueva cualidad

thumbs_laitman_546_02El deseo de recibir puede cambiar de tamaño (en su densidad), empezando desde el nivel raíz al cuarto nivel. Y cada uno de ellos se divide cada vez más en subniveles, por lo tanto termina con 125 grados o niveles. Y todo lo que hay en nuestro mundo también se mide según el tamaño, de acuerdo a la cantidad, y a la cantidad que influye en la calidad.

Si miramos alguna sustancia por ejemplo, sus características se establecen por el número de electrones, protones, y neutrones dentro del átomo. La calidad de la sustancia depende de su cantidad. Si añadimos electrones, obtenemos una nueva sustancia.

Eso es lo que sucede con la sustancia inanimada y lo mismo puede relacionarse con plantas, animales, y seres humanos. Para nosotros es más difícil identificar esto en lo que respecta a nuestras sensaciones, pero es así. Todo depende de la cantidad de esfuerzo que hacemos, de la cantidad de información que recogemos de ellos. Por eso se nos dice, «No hay nadie tan sabio como el experimentado», porque él añade información todo el tiempo, hasta que alcanza una nueva cualidad, una nueva comprensión y sensación.

Todo depende de las acciones más sencillas. Nada existe en la realidad, aparte de la recepción y el otorgamiento. Y, de hecho, ni siquiera el otorgamiento existe, sino que hay una recepción que se transforma en otorgamiento gracias a la intención. Todo está basado en «más» (+) y «menos» (-).

Por lo tanto, todo el trabajo es añadir cantidad constantemente. Y la cantidad que se recoge comienza a exigir una nueva cualidad, una comprensión del por qué y para qué estoy haciendo esto. Comienzan a surgir preguntas, y estas nos llevan a acciones más cualitativas ya en un nuevo nivel. Pero también a ellas hay que añadirles más cantidad hasta alcanzar una nueva cualidad.

A través de nuestras acciones, nosotros atraemos la Luz que Reforma que actúa todo el tiempo y añade una nueva gota de cambio todo el tiempo. Al final del asunto, «muchos centavos acumulan en una gran suma» hasta alcanzar la capacidad de llevar a cabo acciones intencionadas que se miden no en función de las acciones mismas, sino de acuerdo a la intención.

(114873 – De la preparación para la lección diaria de Cabalá del 8/13/13)

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