Es importante, incluso para un gran sabio, anularse ante sus discípulos. Tiene, por supuesto, un millón de veces más sabiduría que ellos, pero no tiene los atributos de conexión y otorgamiento mutuos, que cultivan entre ellos, pues son varios y él es uno solo. Por eso, está dispuesto a ser más bajo ante ellos.
Por eso, un grupo cabalista, en su valor espiritual, es mucho más elevado que cualquier cabalista; más elevado que cualquier sabio, porque ahí se manifiesta la cualidad de otorgamiento mutuo.
Lo más importante es que nos anulemos al máximo ante el grupo, ante su determinación interna, en conexión interna y así, nos acercamos más a la cualidad de otorgamiento, al atributo del Creador. El Creador está en el centro del grupo y hasta dónde enfoque este centro y comience a sentirlo, en esta medida, puedo revelar al Creador.
El grupo es un pequeño conjunto de gente, pero bien orientadas al objetivo. Aún no pueden hacer nada espiritualmente ni entienden dónde están, pero están unidos. Y, su asamblea, es más elevada en la construcción espiritual, que un gran cabalista que está solo.
Finalmente, construyen al Creador dentro de ellos, es decir, su estado es más prometedor y por consiguiente, el Creador está más ocupado con ellos.
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Del Congreso Internacional de Cabalá “Elevandonos por encima de nosotros mismos” 8/ene/22, “Nos apegamos a los amigos”, lección 3
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